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160 LOS FRANCISCANOS CAPUCHINOS EN VENEZUELA paro e importante para vuestro cargo, respecto el mucho tiempo que ha pasado sin hacerlo. Del puntual cumplimiento de lo aquí dispuesto, me daréis cuen- ta de la primera ocasión. Madrid, 5 de mayo de 1702.—Yo, El Rey.— Manuel de Aparegui, Secretario". Esta Real Cédula, tal cual está redactada, revela la de- ferencia que el Consejo de Indias y Su Majestad el Rey te- nían por los Obispos, pues ruega que le concedan al Prefecto de las Misiones facultad para administrar la Confirmación, y esto a pesar de que ya tenían privilegio de los Papas. Esta facultad era indispensable, si se tiene en cuenta que algunos pueblos de Misión estaban a más de cien leguas de Caracas, sin caminos, para que el señor Obispo pudiera ir con alguna frecuencia. 5. Otra Real Cédula para fundar una Villa (1): "Mi Gobernador y Capitán General de Caracas: Fr. Marcelino de San Vicente, Prefecto de las Misiones de Los Llanos, me ha repre- sentado la necesidad que tienen los Misioneros de poblar los indios en las riberas de los ríos caudalosos, donde abunda la pesca y caza, por ser precisa para su manutención en los primeros años de la po- blación, hasta que se acostumbren al trabajo, pues los Misioneros no pueden atender, al principio, al vestuario y demás necesidades ur- gentes de los indios, y ellos sacan de los ríos lo que necesitan para su alimento. Pero corno, en estos nos no hay pueblo de españoles que sirva de contención, sucede con frecuencia, como aconteció el año 1700, que se huyeron dos pueblos y la mitad de otro, y este año se fueron va- rias familias por los mismos ríos. Suplicándome que para contener a dichos indios se le conceda Licencia. para fundar en la unión de los ríos Parayrna, Cojedes y Pao un pueblo de españoles. Esta villa, como la de San Carlos, servirá para contener los in- dios de los pueblos que están más arriba, y otros que se irán fundan- do en las riberas de dichos ríos. Pues se ha visto y experimentado gran fidelidad en los mulatos y pardos, y se hallan siempre dispuestos y prontos a servir y ayudar a los Misioneros; hay muchos de éstos que desean poblarse en la villa que se pretende fundar, a fin de evitar por aquella parte las fugas, ayudar a los Misioneros en las entradas a sacar los indios. Habiéndose visto en mi Consejo de Indias con el informe del fiscal, y atendiendo a lo mucho que conviene dar todas las providen- (1) Biblioteca Nacional de Madrid, signatura 3.561, D.'158.