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MISION DE LOS LLANOS.—CAPITULO VIII 135 4. Este P. Manuel de Alesón, causante de tantos disgus- tos, regresó a la Misión al poco tiempo, como se desprende de la siguiente carta del Secretario General del Consejo de in- dias (1) "]Reverendísimo P. Comisario General de las Misiones de Padres Capuchinos. Reverendísimo Padre: En carta de primero de este mes avisa Vuestra Reverencia que se ha modificado ci personal que debía ir a las Misiones de Los Llanos de Caracas, por haberse enfer- mado alguno y no ser otros a propósito; y manda los nombres de los ocho que han de embarcarse en los galeones que están para salir de ese puerto para las Indias; entre los cuales están los PP. Gabriel de Sanlúcar y Manuel de Alesón, que vinieron de aquellas Misiones y han de volver a ellas, y pide Vuestra Reverendísima se envíen los Des- pachos......En cuanto al nombramiento del Prefecto que los visite, etc., queda la cuestión en estudio.--De Vuestra Reverendísima afec- tísimo y seguro servidor, Ortiz Otalora, Secretario.—Madrid, 13 de septiembre de 1689". Llegado a Caracas el P. Manuel de Alesón, continuó las Misiones de los valles del Túy e hizo varias fundaciones. En el Archivo Nacional de Madrid se conserva una carta origi- nal de los párrocos de Caracas a este respecto; dice así (2): "Los que suscriben, curas párrocos de la ciudad de Caracas, dan testimonio de la buena conducta del P. Manuel de Alesón, a quien el Ilustrísimo señor Obispo de la diócesis encomendó el cuidado de las Misiones del Valle de Tácata y de las Doctrinas de Charallave, ejer- ciendo el ministerio con universal consuelo de todos; fabricando bue- na iglesia y dando siempre demostraciones de verdadero Capuchino y crédito de la Orden, ayudando en todo a los euras.—Caracas, 23 de abril de 1690.—Dr. José Heredia, Dr. Francisco Piñango". Estas Misiones de los valles de Tácata, de que se hace re- ferencia en la precedente carta, tienen que ser, además del pueblecito de Tácata, donde hizo buena iglesia, Paracotos y Santa Rosa de Charallave. Los documentos que a continuación copiamos aclaran el origen de estos pueblos, y nos hablan, al mismo tiempo, de la fundación de San Diego de Ocumare. "Documentos tomados de los Originales por el Sr. Cura de dicha Parroquia, D. Francisco Fernández, el año de 1792. Empieza con di- (1) Biblioteca Nacional de Madrid, signatura 3.561. D. 62. (2) Signatura 3.561. D. 95.