BCCCAP00000000000000000000503

MISION DE LOS LLANOS.—CAPITULO VII 123 viduos mal avenidos con la moral cristiana, de los cuales in- conscientemente se hizo eco el P. Alesón. 7. Causó gran extrañeza a este bendito Padre cuando llegó a estas Misiones el que hubiese un hato de ganado va- cuno que los fieles, vecinos de aquellas comarcas, dieron de limosna para la Misión, y que no llegaban a doscientas en- tre vacas y terneras, necesarias para el sustento de los indios enfermos y Misioneros impedidos, viejos y achacosos. Asimismo, le extrañó el que se obligue a los indios sanos a trabajos en la labranza, para sembrar maíz, legumbres y yuca que se consumen en la Misión; y lo mismo de la siem- bra de algodón que se hace todos los años para atender al! vestido de todos; lo que se recoge se reparte a razón de me- dia libra por semana a las indias, para que lo hilen, después otras lo tejen, y luego se distribuye según las necesidades, a fin de que se presenten con alguna honestidad en la iglesia a ecibij los Santos Sacramentos. S. Es cierto que en todas estas manipulaciones tiene que intervenir directamente el Misionero; porque, si no se to- mara este trabajo, nadase haría ni podría hacer por la in- dolencia y rusticidad de estos indios, y por su viciosa floje- dad y pereza, que los hace incapaces de toda obra de prove- cho; no puede el Misionero fiarles la menor diligencia de es- tos quehaceres, para todo se necesita la presencia del Padre Todo esto le pareció al P. Alesón muy ajeno de nuestro ministerio y pobre instituto; y, sin embargo, no hay otro me- dio, si se quiere reducir a estos indios, porque sin estas pre- cauciones y cuidados, sin ese trabajo continuo y esa econo- mía que llamaríamos doméstica, se hace imposible la vida para los Misioneros y los indios; mantener en un desierto a quinientos y más indios todo un año, ¿qué digo?, diez años por lo menos, hasta que se forma una nueva generación con hábitos de trabajo y economía. La falta de alimento en las Misiones fué muchas veces causa de las fugas, otras pretexto para ir a las cacerías y pes- ca, sin que volvieran a la Misión; y el único medio de obte-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz