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Esto dem.uestra que Dios cuida de todas las cosas en vistas al hombre, de quien tiene un cuidado especial. Por encima del problema del sufrimiento. y de los pecados que Dios permite, hay que tener siempre seguro, aunque nuestra razón no Jo vea claro, que Dios es sumamente bueno y en toqo Jms~~ un bien. La fe en la Providencia ha de dar una profunda tranqmhdad al cristiano, aun en los insoportables reveses de la vida. Dialogo y Repaso 1. ¿Cuál es el atributo que más te gusta considerar en Dios y por qué? 2. Muchas veces querríamos un milagro para remedio de una necesidad. ¿Está contra la bondad de Dios el que no se nos conceda? 3. La verdad de que Dios lo sabe todo, a unos les parece es– pantosa, a otros consoladora. ¿Por qué será? LECTURA La providencia divina exi~e colaboración El sabio franciscano Duns Escoto oyó, paseando por el campo, que un labrador blasfemaba horriblemente. Rogóle que no se arrojase con tanta ligereza al infierno, mas contestóle ~l laJ:>rador que Dios ya sabía si se había de salvar o condenar, y así nada mflmría el que blasfemase o no. A lo cual replicó el fraile: ccNo os fati– guéis, pues, en labrar vuestro campo, porque también sabe Dios si habéis de tener buena cosecha o no, y así habrá de ser por más que os canséis». Por este absurdo entendió el labriego el de sus ideas sobre la Providen– cia de Dios. 38 Aplicacion a la vida Una reflexión: El salmo 139 canta la omnisciencia y la omnipresencia divina: ce ¿Dónde podría alejarme de tu espíritu? ¿A dónde huir de tu presencia? Si subiere a los cielos, allí estás tú ; si bajare a los abismos, allí estás presente. Si, robando las plumas a la aurora, quisiera habitar al extremo del mar, también allí me cogería tu mano y me tendería tu diestra». Un propósito: No ·olvidaré nunca que el Dios bueno y justo ve todo lo aue hago.