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6. LA HISTORIA DE TODOS LOS PUEBLOS A pesar de los errores e inexactitudes .acerca de la naturaleza de Dios, todos los pueblos han creído en la exist.encia de un ser su– perior, de quien el hombre depende en su vida material y en su conducta moral. La historia de las religiones ofrece una prueba al alcan– ce de todos. Pues no es posible que la humanidad entera esté orientada esencialmente hacia el error en la expresión de sus sentimientos más elevados. La idea de Dios surge, pues, naturalmente en la ·inteligencia del hombre al considerar el mundo. 7. QUIEN ES DIOS Supuesto que tiene que existir un Ser que dé razón de todas las cosas y que llamamos Dios, nos preguntamos más en concreto quién es Dios. Y la doctrina cristiana nos responde más de lo que pode– mos conocer corr sola la razón. · Leemos en el Catecismo: Dios es nuestro Padre, que está en los cielos; creador y Señor de todas las cosas, que premia a loSi buenos y castiga a los malos. Y sigue todavía el Catecismo: Dios es espíritu purísimo, infinitamente perfecto, bueno; sabio y eterno, principio y fin de todas las cosas. De los argumentos que se dan para probar la existencia de Dios se deduce que Dios es el único ser que tiene en sí mismo la razón de su existencia, y por eso existe necesariamente y tiene que ser eterno e infinitamente perfecto. Por el contrario, todas las cosas del mundo tienen la razón de su existencia en Dios, siendo imperfectas y temporales. 8. EL ATEISMO El ateísmo consiste en la negación de un Dios personal superior al mundo y en quien está la razón· de todo. El ateísmo coloca al hombre en la postura más absurda que se puede imaginar, ·pues le priva de toda luz que le pueda orientar en el descubrimiento y realización de su propio destino. La causa fundamental del ateísmo es la soberbia del hombre, que no quiere depender de nadie y cree que negando a Dios se libera de un peso que le oprime. .22
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