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San Jo.st:, reciiJió también un anuncio de1 cieiu que le encargaba de custodiar el mistNio del nacimiento de Je.sús. Iia!Jiendo ido, pues. a Belén María y Joé;é para cumplir la orden de empadronamiento en su lugar de origen, aL:unteció que nació allí .Je::;ús. Fno:e; pastores, adnTtidm; por los úngelt'éi del cielo, se llegaron a adorarle. Tambi{~n llegaron unos Magos de Oriente gmados por nna e:strella prodigío:sa. Diee ('l Evangeli,) que , Maria guardaba todo esto y lo meditaba en su corazón (Le 2, 19). Tu-vieron que marel1ar a Egipto lrnyendo de HNodes y, finalmente, se irn,talarcin en Nazaret, donde üvieron humildemente y donde murió San José. ,Jesús, llacia los treinta afi.os , comenzó sn preclica– ción y María .seguía atentn ln que El hacía. A requerimiento de su Madre obró Jesús el primer milap ro, convirtiendo el agua en vino. Cuando murió crucificado, allí estaba María junto a la Cruz; y siguió unida a los discípulos que, l"f!lmidos con ella en oración, recibieron el Ec;píritu Santo. De ese modo ei nacimiento de la Iglesia, lo mismo que el nacimiento de Cristo, se verificó al calor del amor maternal de María. Después ele algunos aüos pasad:)s en compañía de San Juan, María murió. Pero, a semejanza de Jesús su Hijo, resucitó en seguida y fue Ilcvadit en cuerpo y alma a los cielos. ~.-INMACULADA CONCEPCION El pecado original (''-; una mancha ele la humanidad que todo hombre contrae en el mismo rnomento dP su concepción, es deé'.ir, al empezar a ser persona humana. Pero esta mancha del pecado original no pudo llegar a María, pue;s; ella era la df;.stinada a sr:r Madre de Aquel que quebrantaría la cabeza ele la serpicute diabólica contrarrestando el efecto del pecado original. Inmaculada CDnCPlH'ión de María quiere decir que la Virgen Santísima no tuvo mmca el pe<::ado original siendo esclava ele Sa– tanás. sino que desdp el primer instante de sn existencia poseyó ln ';n1cüi, santificante que la llacía amiga de Dio.s. E"it<: privilegio de Mana :-,C elche a los méritos ele Cristo. pues por estar· dr"itinada a ser su Madre no tuvo nada que ver con el demonio. En do,; lngare.'; de la Sagrada E.scritura se funda nue3tro rnno · eimiento de la Inmaculada Concepción de María: 1) En h senteneb de Dio5 contra el di,iblo después del pecado de los primeros padres: «Pongo perpetua Pnemi.stad entre ti y la mujN, y Pntre tu linaje y Pl suyo: éste te aplastará la cabeza. :>
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