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12 LA VIRTUD DE LA ESPERANZA r =os:nt::on:-en ::ida:pui:l. ;:rd:: : la 1 fe es ya un comienzo de salvación, puesto que nos transforma en 1 hijos de Dios. Si por la fe hemos comenzado a salvarnos, hay que 1 esperar que nuestra salvación sea un día gozosa realidad. El hijo 1 está llamado a participar de la herencia del padre: «Somos hijos 1 de ·Dios y si hijos, también herederos, herederos de Dios, cohere– deros de Cristo» (Rm 8, 16-17). 1 Es la virtud de la esperanza un complemento íntimamente liga- 1 do con la fe; permanece en el alma, aunque hayamos perdido la 1 gracia, mientras no se peque directamente contra ella, y es la virtud 1 que ensancha nuestro corazón en medio de los trabajos de este 1 mundo, ante la perspectiva de una felicidad sin fin. I Mira tu crucifijo: Cristo es nuestra esperanza. Y confía, que I si murió por ti, te dará también la vida eterna. _j .._ _________ _ CONCEPTO DE LA ESPERANZA Dios nos ha dicho que el cielo es para nosotros, pero ¿ cómo pode– mos nosotros conseguir esa felicidad? ¿Cómo podrá una creatura vi- 87