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Algunos razonan así: pescar en lugar prohibido no es falta, luego no me obliga esa prohibición. Solamente tengo que pagar la multa si me descubre el guardia, lo mismo que tengo que pa– gar la entrada para el cine. La multa es como el precio para poder pescar aquí. · No parece acertada ésa opinión. Se manda no pescar, y no que pa– guen por pescar. . Las leyes afirmativas no obligan en todo momento, las negativas obli– gan siempre. La razón es que las afirmativas se refieren a hacer el qien, en su debido tiempo, mientras que las negativas se refieren a evitar el mal, en todo tiempo. Oír Misa obliga sólo los domingos y días festivos; no mentir obliga siempre. 'cESACION DE LA LEY La ley de Cristo no cesará como cesó en parte la ley mosaica. Pero -~~~' ieyes concretas de la .Iglesia y de la autoridad civil pueden cesar de dos maneras: a) Intrínsecamente, cuando cesa el fin total de la ley. Así, la ley que impone una aportación económica de todos los ciudadanos para construir una carretera o un edificio, etc... , cesa al terminarse dicha construcción. b) Extrínsecamente, si la autoridad la suprime, o si cae en desuso. La costumbre contraria adquiere fuerza de ley y es como si se supri– lf,-iese la ley en desuso. CESACION DE LA OBLIGACION Pero puede ocurrir que sin cesar la ley, deje de obligar en casos con– cretos. El Obispo de Zaragoza da una ley para sus diocesanos. Si Juan se marcha a Barcelona, mientras esté allí no le obliga la ley de Zaragoza. Se ha liberado de la ley por exención, sustrayéndose a la ley. · Y aun sin recurrir a la exención, puede haber imp-edimento para cumplirla, y quedar dispensado. En el caso de imposibilidad física o moral, verbigracia. 44 Uno no puede ayunar, porque está muy enfermo. Queda dis– pensado de esa ley. La autoridad, por justas causas, puede conceder un privilegio, otor-