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4 LA CONCIENCIA r -----maa--------:, Hemos estudiado la moralidad de nuestras acciones. La norma 1 1 1 1 1 subjetiva de que nos servimos para conocerla prácticamente es la conciencia. Pero ésta puede, por culpa nuestra, deformarse. Va– mos a tratar en esta lección de formarnos una conciencia recta: ni escrupulosa, que ve pecado donde no lo hay, ni tan laxa que no vea el pecado más evidente. 1 1 Cristo tenía una fina y delicada conciencia. Descubría el pe·- 1 cado en la acción más insignificante, y sin embargo no tenía el menor escrúpulo en prescindir de muchas costumbres humanas que 1 Dios no exigía. Una conciencia recta es el gran medio para cum– plir en todo la voluntad de Dios, como hizo siempre Jesucristo. ' 1 ------- - ----- CONCEPTO La conciencia es «el ,juicio práctico que tiene cada hombre sobre la moralidad de las propias acciones». 31

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