BCCCAP00000000000000000000489

cado. Subjetiv~mente, por considerarlo así, esa runa pecó. Con un conocimiento exa~to de lo que pedía Dios, hubiese podido ir a pasear sin oír misa ni ofender al Señor. NORMA DE MORALIDAD Toda norma es como una regla que mide la rectitud o desviaciones de un modo de obrar. La norma de moralidad nos dirá si nuestras obras se ajustan .o no a .lo moral. Con frecuencia se presenta como norma de moralidad la misma na– tµraleza humana, y aunque esto es verdad, puesto que ya .dijimos que no puede haber oontradicción entre la naturaleza y las ulteriores dis– posiciones positivas, sin embargo, nos parece incompleto tratándose de una moralidad sobrenatural, como es la Católica, que tiene exigencias que superan a la misma naturaleza. Teólogos modernos coinciden en determinar como norma objetiva ]a voluntad de Dios revelada en Cristo, en la forma como nos la pro– pone la Iglesia Católica; y como norma subjetiva, la iluminación inte– rior del Espíritu Santo a nuestra razón sometida a la fe: nuestra con– ciencia. Ambas normas se complementan, formando una sola: Cristo, como nos lo presenta la Iglesia Católica. No se trata de una imitación servil de Cristo. El hizo muchas co– sas que no podemos imitarlas: milagros, profecías ... Es más bien una incorporación, una transformación que asimile su modo de pensar y querer. Entonces nuestra conducta se ajustará perfectamente a esa norma de moralidad, aunque nuestras acciones externas sean vulga– res y sin esplendor. FUENTES DE MORALIDAD ¿Qué elementos tenemos que tener en cuenta a la hora de juzgar 1a moralidad de un acto? Los elementos que contribuyen a que un ac– to sea conforme o no con la norma de moralidad son tres : el objeto, Jas circunstancias y el fin. Son los que reciben el nombre de fuentes de moralidad. Si los tres elementos son buenos, el acto será moral. Si alguno de ellos es malo, el acto será más o menos inmoral. Un joven comulga todos los días con devoción para conser– varse puro. Objeto: comulgar (bueno). Circunstancias: todos los días, con devoción (buenas). Fin: para conservarse puro (bueno). Luego esa acción es integralmente buena. Otro joven comulga rutinariamente para que le tengan por 25