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encue11tr<) de un alto personaje de -'la corte de Etiopía; Felipe le convierte y le bautiza. " Dispersión de los Apóstoles: Tiene litgar el,año 42 ó 43, y es moti– vada por la persecución del, Rey Herodes Agripa; parece que enton– ces sólo queda en Jerusalén Santiago el Menor. l. ¿ Qué relación dice el pueblo judío a la Iglesia? 2. Indica los factores que más contribuyeron a la difusión del Cristianismo en los primeros tiempos. 3. Lee los ocho primeros capítulos de los Hechos de los Após– toles. 4. ¿Qué es lo que más impresiona en la vida de San Esteba11? MARTIRIO DE SAN ESTEBAN En el siniestro campo de la lapidac ión Esteban cayó de rodillas. En torno a él la •multitud continuaba aullando a la muerte. Según la l,eiy, los testigos que lo habían acusado, debían lanzar las primeras piedras. A fuerza de brazos las levantaron, las más pesadas ·que pudieron, y las lanzaron sobre el mártir. Grandes y pequeñas, las piedras golpeaban incesantemente la frente, el pecho, la espalda y el rostro. El diácono ni gritaba ni protestaba. Hubo un momento en que gritó: -¡ Señor, Jesús mío, acoge mi espíritu! Y después rodó por el s uelo con la cara .destrozada por un pedrusco. T~ davía le oyeron exclamar con voz potente: - ¡Señor, perdónales este pecado! Y después se calló, dormido ~n e I ·amor eterno. Un poco apartado del lu,gar en que se cometía este crimen, un hom.bre joven permanecía inmóvil, como si la emoción lo hubiera clavado en el sitio. Nada apuesto: bajo, pelirrojo, de barba irregular y piernas torcidas. De vez en vez, nervioso, enjugábase con el dorso de la mano la frente y la parte su– perior del cráneo, en la que eran raros los cabellos. Con el rostro crispado, los ojos fijos y los .dientes hun•didos en los 1abios contemplaba la escena con avidez. A sus pies yacía un montón de vestiduras, las de los verdugos, que, para sentirse más_cómodamente, las habían dejado allí, y este espectador les había prometido guardarlas. En su túnica austera, en sus largas trenzas y en las filacterias que llevaba en las muñecas, esas bolsitas .de cuero que contenían versículos de la Biblia, se reconocía fácilmente su profesión. Era un estudiante de ciencias religiosas, -tm alumno de los rabinos, un custodio de la santa Ley. Era oriundo de Tarso, en Cilicia, y se llamaba •Saulo. (D. ROPS, San Pablo)