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Frente a las figuras tradicionales del Monje y del Religioso Mendi– cante, aparece ahora .el Clérigo Regular, que s·e dedica intensamente al apostolado, prescinde de ciertos ·rigores ascéticos de tipo monacal y, en su aspecto externo, se parece al sacerdote secular. Dentro de este tipo de Religiosos ·que prev~lece en las fundaciones de los siglos XVI y XVII, cabe destacar: Teatinos, Somascos, Barnabi- tas, Escolapios, Oratorianos de San Felipe Neri. _ En el siglo XVII, aparecen en Francia: los Oratorianos de Berulle, Sulpicianos, Eudistas y Paúles. . Santa Teresa de Jesús (1515.:1582) Es una fi•gura central de la Reforma Católica. Nació en Avila y, a los dieciocho años, ingresó en el Carmen de su ciudad. Siente como pocos la ,defección de ,la Alemania protestante, y recorre -España sem– brando el territorio -nacional de conventos carmelitanos en los que se vive se•gún la reforma que ella misma había iniciado en San José de Avila. Esoribe sobre Teología Mística con una profundida.d y sencillez ta– les ,que sus obras son una joya de nuestra Literatura clásica_y le han merecid·o el título de Doctora Mística. Son las más conoci1das : Camino de perfección y Las Moradas. Las hijas espirituales de Santa Teresa, al entrar en Francia, se con– vierten en úno d·e lo_s ferm·entos más ·activos del gran florecimiento mís– tico francés ,del siglo XV.II . LA INQUISICION ESPAÑOLA Era un ,tribunal ,que debía juzgar y castiga,r a los herejes. Fundada por los Reyes Católicos y aproba-da por el Papa Sixto IV, la Inquisición española dependía de los Monarcas. Se la ha calumniado acaso como a ninguna otra institución, y, sin embargo, no existía otro tribunal que procediera con tanta prudencia y benignidad. Sería .farisaico ,de·sde luego escan-dalizarse de que la Inquisi– ción. incurriera en errores, pues como todo tribunal human·o era falible. Algunas ,de sus medidas preventivas nos ,parecen excesivas, pero se ex– plican ,perfectamente en el momento histórico ·de efervescencia religiosa en que le tocó actuar. Algunas ejecuciones -siempre menos de las que dicen sus de– tractores- protegieron la Ortodoxia -de ¡España y alejaron de nuestra Patria las -guerras religiosas que ensangrentaron, durant_eit muchos años, el suelo de Francia y Alemania. 120 \