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LOS INDIOS GUARAUNOS Y SU CANCIONERO 579 Realizados en la forma dicha los cuatro o cinco primeros compa– ses, se complica un poco más el ritmo, añadiéndose un tercer golpe en cada compás: Se realiza primero en la parte de abajo, avanzando el pie derecho y al mismo tiempo elevando el talón del pie izquierdo. sosteniendo fija en el suelo la parte delantera de la planta del pie. Luego va la parte de arriba asentando el talón izquierdo y gol– peando el suelo, y, en seguida, se hace retroceder el pie derecho algo más atrás del punto de partida, golpeando también el suelo con la planta del pie o con solo el talón, pero con viveza y rapidez, a fin de adelantarlo nuevamente al entrar en el nuevo compás: 211 J 4 l)(la il Como habrá observado el lector, durante estos dos primeros tiempos los danzantes no avanzan ni retroceden. Se mueven sin variar de sitio, permaneciendo el pie izquierdo fijo en el suelo por la parte delantera de su planta. Después de cuatro o cinco compases comienzan ya a cantar, si– guiendo el ritmo marcado por los golpes de los pies y las oscilacio– nes naturales del cuerpo para adelante y para atrás, pero sin des– viarse de su sitio, hasta que, después de algunos compases, comien– za ya el avance y el retroceso, coincidiendo esto con la introducción de un cuarto golpe en el ritmo del baile: ~ij J) J) pda p1a tjj J', µd p1r prlt Este ritmo es el que predomina a lo largo de la danza.

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