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LOS INDIOS GUARAUNOS Y SU CANCIONERO 165 color. Los indios lo vieron con recelo y respeto. El forastero traía hambre y pidió de comer, y los indios lo obsequiaron con unas tor– tas de ((yuruma)) recién hechas, que fabricaron las indias. Pero hete aquí que unos muchachos traviesos, acercándose a las tortas ofrecidas al desconocido, colocaron sobre las mismas ex– cremento de perro, cosa que observó aquél, y después de hacer un gesto de asco, desapareció de la ranchería. Al poco tiempo sopló un fuerte viento y comenzaron a morirse los indios. Todos enten– dieron que aquella mortandad era un castigo que les mandaba el Karosimo, el cual se había subido a las nubes, desde las cuales les está siempre mirando con rostro enojado y gesto de asco.