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31 CRISTOCENTRISMO EN SAN BUC~AVENTURA 351 intratrinitaria, al primer principio fonlal: al Padn'. En el esiado de justicia original, la reintegración se hubiera hecho por contacto iE1t,e diato del hombre con el Verbo, que le iluminab:, .,, guiaba. La g;racia y los don0s propios de aquel estado capacitaban al hombre para llegar imr;¡,dialamvnle a la Di\"iuidad por el ·v:erho. Caído el hombn· en el pccndo, el proceso de reintegración a Dios sufri<Í una modificación fundamental, se instauró otra Eccnornfa de salvaci<Ín. El oído y la \isla interior del hombre se incapacitaron, por efecto dd pecado, pa– ra oir y ,er al Verbo en su realidad espiritual y entonces hubo de Sl?ll– sihiiízarse por la crn·;unaci(Ín "ª. San Bu<•nan'nlura descubre en la na– turaleza íntima de las cosas razones muy hondas en virtud de las eua– les la persona divina nuís llamada a encarnarse es el V{ 0 rbo 5 \1. Pero siempre queda en Hrme la afinnaci<Ín honaveilluriana: la razón fun– damental de por qué el V{~rbo lomó la earne humana fue el pecado. Por el pt'cado quedó el hombre del lodo sumergido fil la sensibilidad. Y entonef's Dios le dio un medio de sa!Yación acomodado a la m1e\-a "circunstancia íntima·· en que se encontraba el hombre. El Verbo en sí ya no podía ser camino para el hombre. Y por eso lomó un cuerpo sensihle, susceptible de ser percibido por el hombre. Por t'l cuerpo de– berá llegar el hombre al alma y por el alma a la Divinidarl ckl Verbo y por el Verho a la intimidad de la ,·ida Trinitaria 60 • También el "regn"so·· de todas las cosas a Dios, tiene en san Bne– na'.'e>nlura una insnperable nJerencia logoeéntrica: en prinripio, qt'C' diríamos, en un primer plano o economía de sah,ación, los seres toclos habrían de "regresar•· al seno del Padre por medio del Verbo. Uníca– mente el pecado hace necesario otro camino ele regreso: Cami110 que llamaríamos ocasional, supletorio: la Humanidad de Cristo, median– te la cual el Verbo se nos hace accesible, a los ojos oscurecidos por el pecado. 58. «Horno cadens in culpam ...de spirituali effectus est carnalis, animalis et sen– sualis; et ideo ineptus erat ad divinara virtutem imitandam, ad lucem cognoscendam, et bonitatem diligendam.,. Et quia horno carnalis, animalis et sensualis non noverat nec amabat nec sequebatur nisi sibi proportionalia et consimilia; ideo ad eripiendurn hominem de hoc statu Verbum caro factum est, ut ab homine qui caro ernt, et cog– nosci posset et amari et imitari». Brevilaq,, P. IV, cap. 1 (V, 2Ub). Cfr. De rcduct. ait. ad T healog. nr. 12, 16 (V, 323a, 323b J. III Sen t., d. 1, art. 2, q. 2 resp, (III, 2nb ). 59. III Sen t. d. 1, art. 2, q. 3 (III, 28-31 ), trata expresamente el problema. to. ~.·~c~rm. ({Christus unus omnium .1l1agistcrn, nr. 11~13 (V, 570ab).