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29 CRISTOCENTRISMO EN S.\N BUENAVENTURA afirmaciones fundamentales: la influencia siempre {'S "accide11lal .., nunca esencial. Cristo en cuanto Hombre no es Cabeza, propiamente hablando, de los ángeles: la Cabeza de donde r{'ciben la influencia so– brenatural es Dios, el Verbo 55 • La concepción teológica que san Buenaventura tiene sobre el hom– bre, se funda toda ella en la doctrina dél hombre imagen clt: Dios tri– no 56 • La orientación cristocéntrica de su antropología se '"ª a dcscu-– brir también aquí: en que Cristo sea o no sea señalado como ejemplar de la imagen de Dios en el alma; en que el homhrc sea o no creado a imagen de Cristo Hombre-Dios. De nuevo aquí encontramos un intenso logocentrismo; pero no un cristocentrismo, en sentido estricto: el hombre aparece continuamente como imagen de la Trinidad, y especialmente imagen del Verbo: mw',– tra generación, fonnación y creación ha sido hecho a imagen de es te Verbo. La creatura nace e.specialrncnte destinada a imitar al Vcrho. Razón por la cual el mismo Verbo se bajó a tomar las formas de Hom– bre, para que le pudiésemos imitar 1mís fácilmente ~ 7 • Por eso es d'-'– vado el hombre al consorcio de la vida trinitaria directa ,, inmediata– mente a tra-vés del Verbo. Como la Humanidad de Cristo entra eu la comunión ele la vida divina por su unión rwrsonal con el \'1:'rbo. así también todos los demás hombres. Respecto del cosmos hay que decir algo similar: la interpretación intensamente religiosa y leolágica del cosmos. la fundamenta continua– mente san Buenaventura en su doctrina sobre el t1estigio de la Trini– dad, que está impreso en la creatura más hondo de todo ser cr{'aclo. Aun dentro de la repre8entación de toda la Trinidad que lleva e1 ,. trañada en su ser, todada la referencia al Verbo se destaca visiblemen· te en nuesh·o autor. Pero tampoco aquí puede hablarse de un cristo– centrismo teológico bien logrado: Cristo Hombre no aparece como 55. 111 Sent. d. 1, a. 2, q. 2, ad 7m. (III, 27bl. 56. Véase VEUTHEY, L., O.F.M. Conv.: S. Bonaver.turae Philosoph.ia christiana (Romae, 1943) 188ss. SZc\Bó, T., O. F. M.: De SS. Trinitate in creaturis refulgente. Doctrina S. Bonaventurae (Romae, 1955) 209 pgs. 57. «Generatio, fonñatl.o et creatio nostra est ad imaginem istius Verbi, dicit llernardus. Nata est creatura humana imitari Verbum. Et ideo ipsum Verbum con– descendit ad hu-nanitatem ut possemus ipsum imitari et nos reformare per saum imi– tationem». Serm. in Dom. II Advent (IX, 60b ). - Por sus características person:iles de Imagen-Verbo-Hijo, ya está la segunda Persona de la Trinidad en más directa re– lación a la creatura. Así como el pecado del hombre también decía una especial rela– ción al Hijo: III Sent: d. 1, a. 2, q. 3 trata expresamente el problema (III, 29-30 l.