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342 ALEJANDRO DE VILLALMONTE 22 tológicos; pero en la vida íntima de la Trinidad no hay sino distinción d2 erigen. Porque también en la vida íntima de Dios verifica el Verbo su función reductora de todo al Padre. Ya que el mismo Espírilu San– to, como procede del Hijo, también es reducido al Padre, junlo con todos los demás seres, por medio del Hijo 41 • Así el Verbo es como el que mantiene la cohesión interna del Ser divino trinitario; la tensión ele dela infinita que existe difundida desde el Padre hasta el Espíritu Sanlo, se mantiene en una especie de refo– reucia unificadora hacia el Verbo, al menos para m1estro modo de en– tender las cosas. Por el VeriJo el Padre sale de sí y se difunde hasta el Espíritu Santo; por El retorna el Espíritu Sanlo al Padre. Ya que co– mo Amor mutuo el Espíritu no sólo sale del Padre, sino que vueln, al Padre, para que el Padre no pierda su "dignidad" de Fuente de la Trinidad y razón de su wüdad, según la concepción de los Padres grie– gos, que san Buenaventura sigue en este punto 4 4. Y en este movimien– to y recirculación de la vida didna, en el cual consiste la Trinidad, el Verbo es la "persona media'' "mcdium in Trinilale"; porque El procede del Padre y por El procede del Padre y n1elve al Padre el Es– píritu Santo. Toda esta convergencia de la Trinidad hacia el Verbo corno "per– sona media", no nos autoriza todada para hablar de una aHténtica orientación cristocénlrica de la doctrina Trinitaria del Doctor seráfico. Más bien llamaríamos a esta tendencia "Logocéntrica"; porque no es la Humanidad de Cristo, ni los misterios de su vida terrena el punto de convergencia de la doctrina trinitaria, sino el Verbo mismo, en su persona divina, en cuanto tal, sin referencia explícita a la unión hipos– tática. En esta situación sólo podría hablarse de un cristocentrismo in– directo de la doctrina trinitaria de san Buenaventura. Pero una referencia explícita de la doctrina trinitaria a Cristo Hom– bre, a los misterios de su dela terrena la encontramos también en san 43. Et ideo d1citur , Pater) fontale principium, a r¡uo omnia et in r¡uem omnia per Filium reducuntur... ipse Spiritus Sanctus, cum procedat a Filio, per F'1lium cum aliis ad Patrem reducitur; et propterea Filio appropiatur reduclio». I Sent., d. 31, dub. 7, resp. , I, 552a ). 44. Este aspecto de la doctrina bonav0nturiana hn sü1o expursto en otra parte: ALEJANDRO DE VILLALMONTE, O.F.M. Cap.: Influjo de los PP. Griegos en la doc– trina trinitaria de san Buenaventura, XIII Semana Española de Teologla (Madrid, 1954) 555-577.