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ENQU!Rlll!ON DE DEONTOLOGÍA MÉDICA exigere, peragere sterilizationem ipsam in ordine ad prolem prae– cavendam : est approbare, com– mendare, decernere, petere, per– agere, re m intrinsece malam; ideoque est inhonestum et illici– tum. -!) De variis et determinatis ad sterilizationem cooperationis modis (de cooperatione formali et materiali, proxima et remota, necessaria et libera, licita et il– licita) attendantur principia com– m u n i a Theologiae Moralis, a probatis auctoribus passim tra– dita; et in determinato casu pra– ctico in quo particularis difficul– tas exurgat et difficilis sit solu– tio, fiat recursus ad S. Poeniten– tiariam (96). 91 por sentencia judicial en un caso particular en orden a ejecutar la esterilización, lo mismo que apro– bar, aconsejar, pedir o exigir, realizar la misma esterilización para impedir la prole, es apro– bar, recomendar, decretar, pedir, hacer una cosa intrínsecamente mala; por lo tanto, es inhonesto e ilícito. •!) Acerca de los múltiples y determinados modos de cooperar en la esterilización (cooperación formal y material, próxima y re– mota, necesaria y libre, lícita e ilícita), ténganse presentes los principios comunes de Teología Moral enseñados por todos los buenos autores y si en determi– nado caso práctico surgiere di– ficultad difícil de resolver acú– dase a la S. Penitenciaría. S. CONCRECACION DE SEMINARIOS Y UNIVERSIDADES (13 de abril de 1936) El racismo 77, Eminencia: El año último, en la víspera de la Natividad del Señor, el Au– gusto Pontífice, felizmente reinante, en su alocución a los Emi– nentísimos Cardenales y a los Prelados de la Curia Romana, habló con tristeza de la dura persecución que, como todo el mundo sabe, se ensaña contra la Iglesia católica en Alemania. Pero la principal aflicción del Santo Padre proviene de que, para excusar una tan grande injusticia, se hacen intervenir calum– nias desvergonzadas y por doquiera se difunden las más pernicio– sas doctrinas, falsamente colocadas con nombre de ciencia, al obje– to de pervertir los espíritus y arrancarles la verdadera religión. Ante tal situación, la Sagrada Congregación de Estudios ordena a las "Cniversidades y Facultades católicas que apliquen todos sus esfuerzos y su actividad para defender la verdad contra la invasión del error. Por lo tanto, los profesores deberán emplear todos sus medios me, Textus et Documenta (Series theologica, núm. 251. págs. 101-103.

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