BCCCAP00000000000000000000478

110 AGAPITO DE SOBRADILLO mente Dios y no ningún poder terreno. Como ministro especial de Dios y de la Naturaleza, jamás cooperará para obstaculizar de– liberadamente la capacidad preciosa de engendrar una vida. Leal en toda resolución a este y otros principios fundamentales de la ética y de la moral cristiana, la profesión del médico será el me– jor amigo del individuo y de la comunidad, y el más firme baluarte contra los enemigos de dentro y de fuera; un verdadero canal de bendiciones terrenas y celestiales para la nación que la honra. La habilidad del médico se alzará hasta los puestos más altos entre los hombres y entre los grandes será alabado. Para él estarán re– servados los dones del rey. El deseo y la plegaria de nuestro co– razón paternal es que aquella bendición del Rey de los Reyes se extienda sobre vosotros, sobre todos los que amáis y sobre vuestra patria querida, y que allí siempre permanezca. DISCURSO DEL 25 DE OCTUBRE DE 1946 A LA ASOCIACION DE MEDICOS ESTOMATOLOGISTAS DE ITALIA (107) 99. la misión d:el médiao estomatologista. -Con ocasión del I Congreso de Estomatología habéis manifestado, amados hijos, el deseo de venir a mostrarnos vuestros sentimientos de devoto ho– menaje. Os damos por ello las más rendidas gracias, y con el co– razón paternal os acogemos y os dirigimos una palabra de aliento, y, si fuera necesario, de consuelo. Sentís respeto y amor por vuestra profesión, tanto, sin duda ninguna, en sí misma considerada, cuanto por la misión moral y social que trae consigo. Y a pesar de eso, ¿será acaso temerario afirmar que no son muchos en el mundo los que saben apreciar adecuadamente la elevación de tal profesión y misión, aun entre los que personalmente os conservan y os manifiestan su gratitud personal? Hemos dicho en primer lugar «vuestra profesión en sí misma». ¿Cuántos entre los profanos reflexionan suficientemente para po– der valorizar como es debido o solamente para imaginar de alguna manera el conjunto de estudios y de conocimientos que exige, los esfuerzos, a veces gravosos, a que obliga, las virtudes morales a que pide su ejercicio? Ante todo es necesaria una vasta ciencia de Medicina general para percibir y discernir la acción y reacción recíproca de todo el organismo y de los órganos y tejidos múltiples y delicados que son objeto de vuestro cuidado; ciencia profunda y especializada de cada uno de estos órganos y tejidos, de una sen- <107) Ecclesia, VI (a. 1946), pág 485.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz