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-- 167 - pa con la pena ,de azote, para privarle ,de la vida, mutilarle y mal- 1ratarle)) (86). Por lo ,demás, establece la doctrina .cristiana, y consta con toda certeza por la luz natural ,de la razón que los mismos hombres pri– vados no tienen otro ,dominio en los miembros ,de su cuerpo que el que pertenece a sus fines naturales, y no pueden, consiguientemente, destruirlos, mutilarlos o, por cualquier otro medio, inutilizarlos para ,dichas naturales funciones, a no ser cuando no se pueda pro– v<'er de otra manera al bien de todo el cuerpo11 (87). B) E! Papa Pío XII.--El actual Papa Pío XII repetidas veces ha hablado de la moral del mé~lico. Primeramente, en su discurso (le 12 <le noviembre de 1941 a 800 mé<licos italianos pertenecientes a la Unión Médico-Biológica de San Lu('(l 1 s. Después, el 30 de ene– ro de 1945 en una alocución a un grupo de 120 médicos especialis– tas de las fuerzas aliadas. Y por último, en un discurso del 13 <le {Pbrero <le 1945 a otro grupo {le cirujanos ,de las fuerzas aliadas. Copiamos los párrafos más salientes de estos discursos referentes a obligaciones deontológieas del mé.dieo. a) Obligación del médú·o de subordiw1r lo temporal a lo eterno «El médico cristiano 110 pierda jamás de vista que su enfermo, su h<'ri<lo, que gracias a sus cuidados sPguirá viviendo un tiempo más o menos largo, o a pe~ar de sus atenciones morirá, está en ca– mino hacia una vida inmortal, y ffUf' de las disposiciones del en– fermo, en el momento definitivo <lel fallo, depende su .desgracia o ,m eterna fe]icida<l ... Por eso, jamás se permitirá sacrificar los in– tereses eternos a los bienes temporales, aun los más estimados, como tampoco será lícito poner estos últimos detrás de los vulgares eaprichos y <le las exigencias .de las pasiones. En estas crisis, a ve– ces trágicas, debe ser muy a menudo el consejero y casi el árbitro calificado el médico.)> (Del <liRcurso del ]2 de noviembre de 1944,) (88). (86) Summa Theol .. 11-11. ¡¡. 108. arl. 4 acl '.l 1 [l7) Colección de Encíclicas r Cartas Po11tificias, págs. 715-716. (88) En la revista Ercl<>sia, IV (19-JA1, pág. 1.099.