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1>XTENSIÓN DE.LA FIESTA DE LA D. PAStóRA A. LA ORDEN CAP. 8~7 Cuando en el capítulo general, celebrado el mismo año, se levantó el comi,sario anunciando, en nombre de los capuchinos españoles, que· esta– ba ya en trámites la ansiada unificación, de los labios de todos los capi~ tulares brotó una explosión de júbilo, reconociendo el bien de tal empresa Y el gesto heroico con que se renunciaba a una ipdependencia legal para someterse a la única cábeza que debe tener la Orden. Poco después, León XIII, en 4 de febrero de 1885, mandó expedir el decreto, Quamvjs jnjmjcj Cruds ChdsH, elogiando el proceder de los ca– puchinos españoles, extinguiendo el comisariato, creando la primera pro– vincia d.! España en la restauración y restituyendo la Orden a su unidad primitiva. Pero aquella renuncia no debió ser gratuita, tenía, por decirlo asi, su precio y premio, y lo exig·ió el excomisario, instado, seg·ún se ha dicho siempre, por su hermano el padre Calasanz que también se hallaba en el capítulo. Dicho precio que se pagó, sin discutirse y con aplauso de todos, con– sistió en que el pacto de la unión debía rubricarse con el báculo de la Di– vina Pastora, extendiéndose su fi_esta litúrgica a toda la Orden, como símbolo y coronamiento de la unificación, Unum qvHe et unus J?asíor. Para ello debía acudirse a la Santa Sede e inmediatamente se redac– taro,n las preces y una exposición de los motivos que las razonaban, las cuales fueron aprobadas por el definitorio general. El autor de ellas se ha dicho que fué el padr,e Calasanz y n.o Jo dudamos, porque contienen mu– chas noticias del Cronjcón, publicado por él y del Tiiduo del padre Po– tríes que utilízó para un libro suyo, como después veremos. Ambos documentos son importantísimos y los apreciará el lector con _su lectura. Las preces dicen: «Beatísimo Padre: El infrascripto, procurador general de la Orden de los menores capuchinos de san Francisco, postrado humildemente a los pies de Vuestra Santidad, movido por las reiteradas instancias de algunos provinciales de la Orden y con unánime consentimiento del definitorio general, ;:,idea Vuestra Beatitud que pueda celebrarse en to,da la Orden de los menores capuchinos la fiesta de' la Bienaventurada Virgen María con el título d.e Madre del Pastor Dfrjno en la segunda dominica después de Pascua, con el rito mayor de segunda clase, con la ,misa y el oficio ya aprobados para los capuchinos de , España y de otras provincias.-Con– vento de capuchinos de Roma, 29 de octubre de 1885.-Fray Bruno de Vinay» ( 1). Junto a esta súplica iba la exposición de los motivos, formulada así: (1) ,Beatlssime Pater: Infrascriptus Ordlnis Minor. S. Fr. Gapuccinorum Procurator GENUS, ad pedes S. V trae. ' humillime provolutus, ad iteratas nonnullorum Ordi~is provincialiútn Ministrorum instantias, ac de unanimi RMr. Definitorii Gus consilio, Benignitatem Vtram, exorat quatenus Festum B. M. V. Deiparae sub titulo Divini Pastoris Matris, Dominica 2.ª post Pascha, sub ritu duplici IIª classis, cum Missa et Officio pro Fratribus Hispanae alia– rumque Provinciarum jam adprobatis, in universo Minorum Capulatorum Ordine, celebrati possit et valeat.-Qua de g~atia.-E Conv. Min. Capnor. Urbis, 29 Octobris 181\5.-Ft. Bruno , a Vintia. O:d_lnis Proc. Glis., . ANALECTA c., t. 2., pp. 2 y s. '