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CAPILLA DE LA OJVINA PASTORA DE CÁDJZ al contemplar, en visión, el futuro templo, primero que se fabricaba en Es-– paña en honor de la Divina Pastora y el segundo del mundo (1). No bien los muros del templo dieron señales de que aquello iba de ve– ras, cuando ya la tempestad rugía,creando al venerable uno de los conflictos más mortificantes de su vida. El padre Isidoro, a pesar de su humildad y sencillez y de la bondad de su alma para todos, tenía sus enemigos, ému -' los tal vez de su nombre y celebridad. No pudiendo atacarle por la rectitud de todos sus actos, aprovecharon la coyuntura de la construcción del :em– plo, acogida con entusiasmo por la g·eneralidad de los frailes, y tildaron la intervención de estos, en ella, de sem illero de inconvenientes y disgustos, como si toda obra g-rande no se levantara a fuerza de reactiyqs. Por otra parte, en el interior del convento, alg·unos religiosos , movido's de una pie– dad exaltada, habían quitado del estandarte antiguo , que servía para los Rosarios , la p,intura propia suya de la Inmaculada, y en su lugar pusieron otra de la Divina Pastora . Ambos asuntos debieron ser delatados al defini – torio provincial en tono alarmante, pues sólo así se explican las severas y urgentes medidas tomadas , para corregir los casos denunciados. · En efecto, el padre provincial y sus definidores dieron y fiI•maron un decreto, el 5 tje noviembre de 1735, en el cual se dice: «Habiendó, con seria reflexión y madurez , considerado los graves in – convenientes ~ue, causis nobis notis, se orig"inan y nacen, y pueden origi– narse y nacer en adelante, de que el reverendo padre Isidoro de Sevilla .. ., u otro cualquier religfoso de nuestro convento de Cádiz, se ingiera, se en – trometa o entienda en el régimen , construcción o prosecución de la fábrica y obra de la ... capilla de nuestra Señora con el título de la Divina Pasiora, sita en la calle de Capuchinos de dicha ciudad: Por tanto, en virtud del Es– píritu Santo, y con precepto formal de santa obediencia, mandamos a dic_ho reverendo padre fray Isidoro de Sevilla y a todos nuestros religiosos de dicho convento de la ciudad de Cádiz, y a cada uno de por sí, sean hués – pedes o de familia , de cualquier estado o grado que sean, que ninguno, directe o indirecte, por sí o por otro, mediata o inmediatamente, se ingiera, entrometa o entienda en el régimen, construcción o prosecución de la ... capilla de nuestra Señora con el título de la Divina Pastora, sino que dejen el total cuidado de todo, así directo como indirecto, a la venerable Herman– dad de dicho título. Y para el desea do logro de este fin , mandamos, en vir- 1. Se ha escrito que este templo de Cádiz era el primero, dedicado a la Pastora, pero es un error, porque esta gloria pertenece a las misiones capuchinas de Venezuela, según se dedu– ce de los documentos siguientes: •A petición del tribunal del obispo, fray Miguel de Olivares certifica· que siendo viceprefecto y por encargo del prefecto fray Prudencio de Braga, pasó a Caracas para hacer algunas diligencias y, entre ellas, entregar al ordinario el pueblo de la Divl• na Pastora de Mapubares, que deán y cabildo, en sede vacante, recibieron... Diligencias de fi– nes de 1730 y principios de 1731, . En el 1737 era visitado dicho pueblo canónicamente y en acta de la visita se dice que se halló •el altar mayor, el retablo de madera con seis camarines o nichos y sagrario; en éste está una ara y un pixis de plata...; sobre el sagrario María Santí– sima, Divina Pastora, con corona de madera, con dos serafines de lo mismo, como que la co– ronan, un báculo o cayado que tiene en la mano, y un cordero a los pies, todo de madera ... • ARcH. ARZOBISPAL DE CARACAS. Ya el padre Isidoro en el 1722 y en su sermón, LA FUENTE DE ti>s PASTORAS, habló sobre este pueblo, que tiene el honor de llamarse DIVINA PASTORA y Pº: seer la primera iglesia del mundo consagrada a su titular. 8