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782 LA DiVINA PASTORA Y EL BTÓ. DIEGO J. DE C. toda la vida. Esta preciosa reliquia, se venera hoy en .el Museo de la Divina Pastora de Sevilla. Según los datos de nuestros ancianos capu- · chinos, al morir el venera– ble, entre las muchas cosas de su uso que pasaron a don Andrés de Hoyos Limón y a · su esposa, doña Concepción Rodiño, ilustre familia san~ luqueña, füé una de ellas efte estandarte , el cual, mUerto el señor Limón y al ingres:'lr su viuda en las esclavas concepcionistas del Divino Corazón, lo cedió a los ca– puchinos de Sevilla (1). Lé! autenticidad de esta reliquia es indiscutible, por la tradi– ción y por la calidad de la pintura, que es característi– camente colonial y de la épo- .ca en que se hizo su dona,_, ción (2). No podía el padre Claret ofrecer mejor obsequio a su querido misionero que la bandera de su apostolado; · ella sustftuirá a la vieja y en el vertiginoso y continuo Portada de la COLECCIÓN de los opúsculos del Bto. Antonio M.ª·Claret. evangelizar del apóstol por la archidiócesis será el objeto de sus amores y predicación·, el áncora de sus esperanzas y el instrumento con que obra– rá extraordinarios prodigios. Con ella pasará a la América Central y, después, tornando a su patria con la gloriosa insignia en sus manos, re– cordará con yivos perfiles el auténtico tipo del misionero capuchino, a se– mejanza del padre Isidoro y de fray Diego de Cádiz y de otros mil, legán– dola a su muerte para ejemplo de las futuras generaciones. Seríamos muy prolijos si hubiésemos de referir el número, tres veces centenar , de sus misiones cubanas, en las que se ven·eró la imagen de la Di– vina Pastora; pero es necesario, al menos, realzar suficientemente su fig-.1- ra bajo este-aspecto, tocanjo los hechos más Sctlientes y explicando el uso que hacía del estandarte! y los prodigios obrados por su mediación. Predicaba misión en mayo de 1852 en Santa Cruz: el pueblo, formado l. Tuvimos la suerte de que nos regalará también la última cartera con el lápiz que l.!5Ó el venerable, y el último cuadernillo de su diario autógrafo. Regalamos al P. Gumersindo :le Estella las ·dos últimas reliquias pera su provincia. - 2. Consiste en un cilindro hueco de madera dividido transversalmente en dos mitades: en una está asentada la parte superior cel liel),.z°o y en la otra, la inferior; el asta y la cruz se han perdido.

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