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CAPÍTULO V Lustro de la corte en Sevilla- Afecto de los reyes a la Orden capu– china-Toman el hábito capuchino dos cortesanos-El padre Isido· ro venerado por la corte - Le inculca la devoción - Los príncipes celebran la función de la Pastora-Costean la novena los reyes, sus hijos y los grandes de España - El duque de Osuna se hace herma– no con toda su familia-Regala a la Hermandad un estandarte- En– tusiasmo de la corte por la Pastora - El infante don Carlos - La reina Farnesio encarga un lienzo de la Pastora - El padre Isi– doro en besamano de despedida y la dotación regia de la novena - La devoción en la corte de Madrid -Pintura de la Pastora para · ¡ el duque de Osuna-La devoción en Nápoles - Los padres alean· tarinos, Santa María Francisca y la reina de Cerdeña. La Providencia divina dirige los acontecimientos del mundo para sus altos designios. Que la empresa del venerable era del beneplácito de Dios y favorecida con sus gracias, es un hecho patente y reconocido. Ahora esa misma Providencia trae a los reyes de España a Sevilla, y no por una corta · temporada, como sucede ordinariamente, sino por un tiempo indefinido, que se prolongó desde 1729 al 33, por lo que se llama a este período el Lustro de la corte en Sevilla. Entre los fines que el Señor se propuso con esta venida no puede du– darse que fué uno, y quizá el principal, el constituir a los monarcas su ins– trumento para engrandecer y difundir la devoción de la Divina Pastora, dándole un nuevo y trascendental impulso. No de otro modo pueden expli– carse los acontecimientos que vamos a referir. Fray Angel de León ha escrito una interesante página sobre el afecto, veneración y familiaridad con que, en esta ocasión, trataron las reales per– sonas y su corte a los capuchinos de Sevilla, y entre otras cosas dice: «Felipe V y doña Isabel Farnesio fueron siempre especialísimos bien– hechores y afectos a la Religión de capuchinos por muchos títulos y enla– ces , honrándola y sirviéndose de ella en todos tiempos, como de herencia de sus mayores. Los capuchinos fray Serafín de Borbón, hijo de Enrique ó

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