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BIBLIOGRAFÍA DBL Y. P. ISIDORO DB SEVILLA 81 miendo así la práctica de las devocio– nes , que aprendió de sus maestros. Por la importancia y valentía que tie– nen esta s alabanzas y por haber sido publicadas aparte , como Novena efi– caz de las tres Avemarías, las co– piamos a continuación. «Bendito sea eternamente el Eterno Padre, porque crió a María Santísi- , ma para liija suya , y porque le dió tanto poder . Amén. (Ave María). «Bendito sea eterna(J1ente el Eterno I-lijo, porque crió a María Santísima para Madre suya, y porque le dió tan– ta sabiduría. Amén . (Ave María). «Bendito sea eternamente el Eterno Espíritu Santo, porque crió a María Santísima para Esposa suya y porque le dió tanto amor. Amén. (Ave María). «Bendita sea eternamente la Santí– sima Trinidad, porque crió a María Santísima para que fuese templo y habitación suya, y porque nos la dió adornada con tanto poder, sabiduría y amor. Amén. Bendígante, Señor, Divina Pastora con la Santísima Trinidad. don– de _Jesucristo está representado como Cordero. Grabado que ponía el padre Isidoro en l a no- vena y en las convocatorias de su tiempo. Trino y Uno , eternamente todas las criaturas, y te den honra, magnificen– cia y alabanza por todas las gracias, pr errogativas y privilegios que conce– diste a María Santísima, nuestra Pastora. Amén » (1). En el 1722 dió a luz La fuente de las Pastoras, de que también, porrazo– nes históricas y para explicar el motivo de su publicación, se habló de ella anteriormente (2). En el 1732 edita su obra, La Mejor Pastora Asunta, en folio , donde con amplitud explica todo lo concerniente al traje y título de Pastora en la etopeya pastoril, las excP-lencias de la Virgen , su vida mor– tal y g-Joriosa, dirigiendo siempre sus comentarios a presentarla como Pas– tora , sobre todo en su predestinación , en la Encarnación del Verbo , en el calvario , en la orfandad de la primitiva Iglesia, en su Asunción y en sus funciones de medianera universal de los hombres , junto a su liijo en· el cielo. Esta obra influyó poderosamente en la formación del clima asuncío– nista _, que ha venido caldeándose cada vez más hasta nuestros días. Es .su obramonumenta l , editada a dos columnas y contiene 136 discursos. Si– g·uiéronle en 1733 la Vida de santaMaría Magdalena, la pecadora, y los Gri– tos del cielo, obra misional, sobre la maldad y ruina del pecado; y en 1740 la Vida de fray Francisco de Larca, hermano capuchino, en la cual consa– gra a la ciudad de Cádiz , que debió costearle la edición , una erudita y pom– posa dedicatoria con 58 páginas, loando sus virtudes, blasones y hazañas . l. Arch. prov. de los cap. de Andalucía, donde se hall a el decreto del prelado hispa– lense, indulgenciándola. - Las Novenas del padre Isidoro, unas no llevan las tres Ave Me.rías, otras las ponen o aumentan su número. - 2. Véase este libro, . pp. 23-26. De esta obra sólo conocemos un ejemplar entre los raros, de la Biblioteca de la 1,Jniversidad hispaknse.