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insinuaciones del Espíritu. Vive alerta para que el amor intenso que siente por Luis, esté siempre supeditado a su amor también apasio– nado por Dios y sea instrumento y camino de santidad. Isabel y Luis practicaban muchos actos de piedad en común . Participaban juntos en la eucaristía, según las costumbres religiosas de la época; rezaban diariamente los laudes y vísperas y no se en– tregaban al descanso nocturno sin agradecer al Señor las ayudas recibidas en la jornada. Visitaban con cierta frecuencia el monasterio de Reynhartsbrunn, en el que permanecían todo el día. Tornaban parte de los actos religiosos de los monjes, guardaban ratos de silencio conventual y mantenían útiles conversaciones con alguno de los monjes. Estas jornadas en que ambos esposos se hurtaban al ambiente frívolo de la corte reforzaban sus espíritus en la lucha de cada día por ser fieles al Señor. Pero Isabel no tenía suficiente con este alimento del espíritu. Muchas veces cuando Luis dormía plácida y profundamente, abando– naba el lecho conyugal, se arrodillaba sin miedo al frío de las losas del suelo y se sumergía en diálogos embriagadores con el Señor. Probablemente la petición más frecuente de aquellos diálogos místi– cos nocturnos sería la petición de ayuda al Señor para vivir el ma– trimonio según su voluntad . A veces la oración no podía prolongarse todo el tiempo que la santa deseaba. Luis se despertaba y al verla arrodillada en el suelo , soportando los rigores del frío, la cogía cariñosamente de la mano mientras la decía: «Querida hermana, mira por ti y procura des– cansan,. En otras ocasiones recurría a originales estratagemas para ser fiel a sus ratos extra de oración Cuando deseaba dar al Señor las prime– ras horas del día, se ponía de acuerdo con alguna de sus doncellas de confianza -ordinariamente recurría a Isentrudis-. Ésta debía despertarla a una hora determinada , tirando suavemente de uno de sus pies. Sucedía en algunos casos que la doncella se equivocaba y en vez del pie de Isabel, tiraba del pie de Luis. Este se despertaba 70