BCCCAP00000000000000000000457

CAPÍTULO X VIAJE PARA LA AÑORANZA En los primeros días de agosto de 1221, Isabel llevaba ya varios meses de matrimonio, recibió una grata visita. Dos caballeros húnga– ros se personaron en Wartburg y la hicieron entrega de un mensaje de Andrés, su padre. Había recibido noticias de la boda de su hija cuando regresó de la cruzada y se apresuró a felicitar a los nuevos esposos; les hacía también una invitación oficial para ser huéspedes unos días en la corte húngara. Luis e Isabel dispensaron a los caballeros portadores de la real embajada un cariñoso y noble recibimiento. Se celebró en su honor un gran banquete al que fueron invitados representantes de las casas nobles del principado y altos cargos de la corte. Al final hubo brindis por la amistad y prosperidad de ambos pueblos .. Los duques sugirieron a los mensajeros que permanecieran algu– nos días en Turingia, pero estos rehusaron amablemente la invita– ción; regresaban de Aquisgrán donde habían ido para cumplir un voto hecho al partir para la cruzada y sentían legítimos deseos de volver al lado de sus familias. Luis acompañó a los caballeros hasta Eisenach donde debían reunirse con otros compañeros que habían hecho el mismo voto. El duque pagó todos los gastos de los peregrinos en la hospedería de 61