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Según la versión más probable , apoyada por un gran número de los biógrafos y cronistas, Isabel y sus hijos recuperaron una existencia más a tono con su categoría social, gracias a los buenos oficios de Sofía, la duquesa madre. Aunque resulte paradójico , si se tiene en cuenta la poca simpatía que siempre demostró por su nuera, parece que no se le puede negar este gesto noble, valiente y de gran sen– sibilidad humana. Horrorizada por el comportamiento injusto y monstruoso de sus hijos hacia Isabel y los niños , pidió que les invitaran a volver al castillo y fueran repuestos en los derechos usurpados de manera tan injusta y brutal. Para hacer más fuerza, les recordó el grave y solemne juramento hecho a su hermano Luis, en que se comprometían a defender las personas y los derechos de Isabel y sus hijos. La mediación de la duque– sa madre ante sus hijos, fue completamente ineficaz. Se mostró espe– cialmente duro e intransigente Enrique , usurpador injusto del ducado. Convencida de que no conseguía nada por el camino del diálogo y la sensatez, puso en juego otro recurso. Hizo llegar con suma discreción una carta a Matilde , tía materna de Isabel, entonces aba– desa del monasterio benedictino de Kitzingen. En ella la ponía al corriente de la situación lamentable en que vivía su sobrina. Pocos días después llegaban a Eisenach dos carruajes donde fue– ron acomodados Isabel, los niños y las doncellas . Los cocheros traían orden de transportarles a Kitzingen. La estancia en el monasterio de su tía fue el mejor reconstituyen– te para el maltrecho sistema nervioso de Isabel , puesto al borde del aguante por la intensidad de los sufrimientos, tensiones , angustias y sobresaltos. La tía Matilde había imaginado la situación machacada y deplorable en que llegaría la sobrina, por ello instaló al grupo en habitaciones confortables, alegres , llenas de luz y en la parte de la casa independiente de las monjas. Isabel jamás había tenido tanta paz y quietud en el alma y en el cuerpo. Vivió días felices al lado de Herman , padre de Luis, su 132