BCCCAP00000000000000000000450

(BILBAO) 61 de ahora lo hacían estos santos Religiosos río por medio en Deusto por la misma razón, predicándoles la Cuaresma sin interés alguno y reconocimiento de las que recibían entre año, y a los predicado– res daba de comer el Cura. Pero de dieciocho años poco más o me– nos a esta parte, está reducido al interés de ciento cincuenta reales por seis sermones que predican, por ·cuya razón así pueblo como Cabildo se valen de sujetos de diferentes Religiones, como son de San Agustín, Santo Domingo, Mercedarios y los dichos Observan– tes, como es la voluntad de su Cura y fieles Regidores de dicha República, como todo consta de los libros de ella que me remito. El año de 1684 un señor Regidor capitular de esta noble villa tuvo noticia de esta fundación, y llegando al Ayuntamiento díó que– jas a su Alcalde y a otros señores Regidores compañeros, de este mi deseo, diciendo debían llamarme y hacerme cargos. Aquellos dichos señores Alcaldes Regidores respondiel'on que había de ser el llamamiento por obra tan santa y a mis expensas, que si gusta– se sería llamado no para hacerme cargos, sino para darme muchas gracias. Pondero tengo entendido los Beneficiados de e,sta villa y muchos del Gobierno de ella en su· tiempo han deseado tener a estos Reli– giosos Capuchinos cerca para asistencia en lo espiritual, y lo tienen manifestado a sus Religiosos. Y ahora, sea de su motivo propio o solicitud de Observantes, ignoro la cansa de oposición, cuando con dichos Observantes han estado y gastado gran suma de dinero en pleito, por negarles su entrada en dicho Convento a oficios de cuer– pos difuntos, que los llevan a enterrar a dicho Convento, en con– travención de lo capitulado a su fundación, y así bien por desente– rrarles de sus iglesias y llevarles a su Convento diferentes cuerpos, considero esta oposición es guerra que hace el demonio porque no se logre el fruto espiritual :l'.' bien de tantas almas, como se conoce con manifiesta evidencia. Los Conventos ele esta villa y su contorno y sus Religiosos, co– nozco y afinno son muy virtuosos y de grande ejem.plo. Pero digo, también lo son los Capuchinos, y se prueba por los efectos en esta villa, de paso a la ocasión de pedir limosna para alimento de su Convento ele La Guardia en la introducción que hicieron ele la es– cuela ele J esncristo en el Hospital en tan gran servicio a Dios y caridad a pobres enfermos, asistiéndoles los de dicha escuela por turno ele su mano con la grandeza y limosna que se ve y es públi– co, a cuyos efectos y realidad me remito sin más ponderaciones.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz