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26 DEUSTO doña Ana María B. L. lYI., y al P. Vicario y al P. Fr. Francisco dará usted mis memorias y que nos encomiende a Dios, junto con toda esa Comunidad, y lo mismo pide Fr. Miguel. Dios guarde a usted muchos años, como deseo. Bilbao y diciembre, ro de 1680. Siervo y amigo de usted, Fr. Hermenegildo de Madrid.-Padre Guardián. Ante estos hechos no es de extrafíar que la "uilf a de Bilbao se mostrase ansiosa de retener en su recinto a tan santo y sabio misio– nero, qu,e tanto se interesa de palabra y de obra por la salud de sus moradores. Así 'Vemos que en 13 de diciembre de 1680 el SeG:etario de i .. Escuela de Cristo pide a nuestro P. Pro'Vincial para que a,idorice a Fr. Hermenegildo para quedarse más tiempo en Bilbao; entre otras razones, a fin de qiie pueda terminar de organizar dicha Escuela. Y con la misma fecha escribe tamibién el Justicia d,e Bilbao con el mismo fin e idénticas intenciones. He aquí el texto de dichas dos cartas : 5. º Carta del secretario de la Escuela de Cristo al M. R. P. Provincial de Castilla solicitando licencia para que el P. Hermelnegildo se quede por más tiempo en Bilbao ( r). Muy R. Padre: Notará V. Rma. en esta carta el que sin haber rendido gracias de un beneficio recibido, entramos a la pretensión de otro, y aunque el cargo es muy legítimo, hallaremos su salida en el gran celo de V. Rma., quien, admitiendo de nuestra parte las gracias que damos a V. Rma., con el debido rendimiento de la caridad que en esta villa ejercitó con el motivo d<:; haber estado la Cua– resma pasada en compañía del P. Guardián de Laguardia el Padre Fr. Hermenegildo, de Madrid, entablando mediante su grande es– píritu e igual prudencia, Escuela de Cristo en la cual se hallan con– gregedos ya entre eclesiásticos y seculares ciento cuarenta herma– nos no de la peor suerte, antes bien, de la más lustrosa, y si no Sé: hubiera negado la introducción a algunos por el exceso del nú– mero de los admitidos, pasarían sin duda de trescientos, de que nos persuadimos recibirá V. Rma. gran consuelo espiritual por ver c¡ne un hijo de su sagrada Religión ha elegido Dios por ins– trumento para obra tan de su servicio, por cuya razón también en– tramos con plena confianza a la pretensión de que V. Rma. se sir- (r) Arch. Cap. Prov. Cast., 32/000029. Ms. rubricado, 3 r X 2 r, dos hojas, estando una en blanco.

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