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do, en 1947, vea que se establece en su pueblo un convento de capuchinos, soñado y preanuncíado desde sus primeros años de sacerdote, y el 20 de mayo de 1951 verá la iglesia abierta al culto. Sufrirá, por el contrario, también inmensamente, cuando en 1954 se le comunica que hay un proyecto de levantar una capilla en la Capa Romana para acoger y preservar aquel olmo a cuya sombra había gozado los gozosos coloquios con Dios y los dolores de las llagas invisibles. Cuando se lo contaron sus campesinos, dio esta contestación: - Yo no quiero saber nada ni doy mi aprobación. Pero la capilla se levantó igual, en 1958. Unos años antes de morir verá llegar a San Giovanni Rotondo un conjunto de cuadros que reproducían a Pietrelcina, pintados por Lino Farnesi. El P. Pío los contempla emocionado y da las gracias a los que se los presentan: -Me quitáis cuarenta años de encima. Un día Adolfo Affatato de Foggia le proyectará una película sobre Pietrelcina, los lugares y ambientes de su infancia, con las viejas iglesias y las viejas casas. Después, en pago, pedirá al octo– genario P. Pío que bendiga su boda y oirá estas palabras: -Sí, aunque sea a medianoche. Te estoy agradecido, hijo mío. Y bendecirá aquella boda, la última de su vida. -Saludos a la Morgia. Seguramente que la gente amada y sencilla de aquel tiempo no volverá más- acostumbraba a decir a cuantos iban o venían de su pueblo. -Muchos saludos a mi pueblo y dime qué es lo que hacen los buenos cristianos- será la recomendación que hará al P. Lino Barbati que iba a Pietrelcina. A un capuchino paisano suyo, fray Modestino Fucci, que le preguntaba si quería algo para Pietrelcina, le dirá: -No quiero nada. Sólo una cosa: no hagan "desaparecer" nuestro pueblo. Por Lucía Ladanza, una dirigida suya de Pietrelcina, se infor– mará, en 1960, si sigue en pie la vieja escalera exterior de su casa. Al extrañarse Lucía de que se acordase de aquella vieja escalera, el P. Pío precisará: - Recuerdo cada piedra de Pietrelcina. Nuestro pueblo hemos de llevarlo muy dentro. Haz lo que puedas por servir de ejemplo a todos. 70