BCCCAP00000000000000000000447
Otra demuestra así su admiración agradecida por el tiempo que estuvo bajo su magisterio: "Aunque no tenía mucha cultura, porque apenas había ido a la escuela -según nos confesó- nos hacía mucho bien sus lecciones, por la unción, el poder de convencimiento, las cosas interesantes que nos decía y el cariño y la ilusión con que hablaba de la oración, de la pobreza o de la mortificación". Antes de seguir adelante con la biografía, se impone una aclaración: La M. Inés no era una analfabeta. Cuando vino del pueblo, como parece que por humildad dio a entender a sus novicias, además en los años de novicia y votos temporales reciben clases de cultura y, por ello, todas las religiosas poseen una buena base cultural básica. Esta formación razo– nable permitió a la M. Inés beneficiarse de sus estudios y lecturas durante los veintidós años largos de vida religiosas que precedieron a su elección para maestra de novicias. Pero el secreto de los buenos resultados de la M. Inés con las novi– cias no puede atribuirse exclusivamente ni a sus conocimientos o cultura, ni a su interés y acierto personal. Nos da pie para hacer las afirmaciones que anteceden, la intensa vida interior de la M. Inés. Está fuera de toda duda que mantenía con el Espíritu Santo unas relaciones habituales y fluidas, que era todo oídos para captar las hablas del huésped divino que luego llevaba a la práctica con ejemplar prontitud. Por eso, con todo derecho puede afirmarse, que la labor de la M. Inés en el noviciado fue una labor compartida con el Espíritu Santo. Pensamos además que otro gran secreto en el acierto y eficacia for– mativa de la M. Inés con sus novicias residió en la fuerza de arrastre de su ejemplo personal. Todos los pedagogos aceptan unánimes que los alumnos -aquí novicias- aceptan más fácilmente y conservan más tiempo y con cariño las enseñanzas recibidas, si el profesor enseña a sus alumnos algo que él vive y pone en sus palabras el calor, la estima y el entusiasmo que le inspira la propia experiencia. En estos casos, no necesita demostrar la importancia de lo que enseña, lo intuyen los mismos alumnos, por el interés con que lo vive el propio profesor. 244
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz