BCCCAP00000000000000000000429

EL MENSAJE DE LA BIBLIA no tendrá jamás sed, que el agua que yo le dé se nará en él una fuente que salta hasta la vida eterna." (Jn., 4, 13.) En la conversión del gran rabino de Roma, Israel Zolli, la lectura de la Biblia influye de una manera decisiva; ella le lleva a la conclusión de que Cristo es el Mesías anunciado a los Pa– triarcas, a los jueces, a los reyes del Antiguo Testamento; a la conclusión gozosa y radiante de que Cristo cumple perfectamen– te las profecías de los videntes de Israel, y que, por tanto, Cristo es centro de la Biblia y de la historia humana. A través del cántico del Magnificat en la penumbra silen– ciosa de Notre Dame, de París, Dios se revela al alma del poeta incrédulo y materialista Paul Claudel. La lectura asidua de los Evangelios, interpretados auténticamente por la Iglesia Católi– ca y Romana, le descubre la Divinidad de Jesús y enciende de nuevo en su corazón la llama de la fe perdida en su adolescencia. CONVERSIÓN DE ENRIQUE MATORRAS Quiero apuntar un tercer hombre que recobró la fe y vol– vió al seno de la Iglesia, influenciado por la lectura de los Evan– gelios: Enrique Matorras. Fué secretario general del Comité Central de las Juventudes Comunistas de España desde 1932 hasta el año de su reingreso en la Iglesia Católica, en 1934. El mismo refiere su conversión y la influencia que en ella ejerció la lectura de los Evangelios. "Mi educación, que debo a los hermanos de las Escuelas Cristianas, me había proporcionado una buena instrucción ele– mental. Juntamente con una buena formación cristiana, hubiese sido para mí una bendición; al faltarme ésta sólo sirvió para au– mentar mi ruina. El trabajo durante el día era duro en extremo: desde las ocho de la mañana hasta las once de la noche, expues-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz