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266 El. MENSAJE DE LA BIBLIA to de la comunidad existen dos modalidades: o se pagan can– tidades fijas o cantidades proporcionales a los ingresos, o la combinación de ambas formas. En caso de enfermedad o muer– te del jefe de familia, el fondo de ayuda mutua asegura lo ne– cesario, ayuda que se da en metálico o mediante el trabajo de los demás miembros. La autoridad es una Asamblea general, que elige un Consejo, que a su vez delega en un Comité eje– cutivo la administración de la colonia. 3) Quibbuts (palabra hebrea que significa reunión, agru– pación): El tipo de colonia más generalizado y más curioso es llamado quibbuts. Jamás podré olvidar la ilusión con que un israelita me hablaba de los quibbutsim. "Estos constituyen-de– cía-una de las creaciones más geniales de nuestro Estado. Los jóvenes educados en ellos han sostenido la guerra contra los árabes. Nuestros niños tienen a su disposición toda clase de medios de instrucción e incluso de juguetes, en un grado que no es superado por las familias adineradas de otros países." El quibbuts es una colonia colectivista, lo cual no quiere decir que sea comunista. El principio que rige la vida del quib– buts es el conocido: "Cada uno según sus posibilidades, a cada uno según sus necesidades." La propiedad es colectiva, y todos, hombres y mujeres, trabajan por igual. La educación y vida de los niños es colectiva, y lo es también parte de la vida del adulto. No existe forma alguna de ganancia privada. Lo obtenido por la venta de los productos, satisfechas las necesidades pri– mordiales de los miembros, se invierte en el mejoramiento in– dustrial o agrícola de la organización. El comedor, la cocina, el almacén de ropas, las medicinas, la sala de lectura, son comunes para todos los miembros del quibbuts. El lavadero es una institución ·comunal; cada uno de