BCCCAP00000000000000000000423

220 ISIDORO DE VILLAPADIERNA En cuanto a la Cor o na de Ca s ti 11 a, las noticias, en nin– gún caso documentadas, sobre la Tercera Orden, nos vienen exclu– sivamente de los cronistas, propensos a deducir el florecimiento de la Tercera Orden paralelamente a la difusión de la Primera y Segunda, y muy pródigos en considerar terciarias las personas, espe– cialmente de la nobleza, que favorecieron a la Orden franciscana y fundaron conventos. Comenzamos con un hecho evidentemente antihistórico, pero típico de la formación, curso y deformación de ciertas tradiciones o leyendas a través de los cronistas. Se trata, nada menos, de un supuesto terciario en 1214, un cierto Juan, canónigo « cardenal» (título honorario) de Santiago de Compostela, que trató a S. Fran– cisco en su visita al sepulcro de Santiago, y deseoso de mayor perfección se retiró aquel mismo año a la soledad de un monte, entregado a la penitencia y al apostolado. Francisco Gonzaga, en 1587, escribe de él: « Qui et Tertii Ordinis fuisse creditur ». Juan Bautista Moles, en 1592, afirma: « Y assi entendemos fue él de la Tercera Orden de la penitencia de N. P. S. Francisco y las dichas beatas dél enseñadas, de la dicha Tercera Orden». En 1625 Wadding, desconcertado sin duda ante un terciario ya en 1214, se inclina a creer que más bien tomaría el hábito de la Primera Orden. Damián Cornejo, en 1684, prudentemente le hace tomar el hábito de terciario « en los últimos años de su peregrinación». Pues bien, todavía en 1772, el máximo cronista de la provincia franciscana de Santiago, Jacobo Castro, sin el menor asomo de duda, hace terciario al ca– nónigo en 1214: « Lo cierto es que allí se quedó el cardenal con hábito de Tercero de Penitencia» 3 • Sigamos ahora el « iter » de la leyenda o tradición de San Fer– nando III, rey de Castilla y de León, muerto en 1252, supuesto terciario franciscano. A finales del siglo XIII el franciscano Juan Gil de Zamora, de la corte de Alfonso X el Sabio hijo de S. Fer– nando, y preceptor (y acaso secretario) del príncipe Sancho nieto del Santo, escribió una breve vida del Rey santo, cuya devoción a la Orden franciscana apenas se deja entrever en una frase, copiada del Chronicon de Lucas de Tuy ( « el Tudense ») 4 • Ninguna alusión 3 A. LóPEZ, O.F.M., Viaje de San Francisco a España (1214), en Arc/1. Jber. Amer. 1 (1914) 258-264. Hay todavía una noticia más peregrina: San Francisco fundando en el mismo año toda una hermandad de la Tercera Orden en la villa de Trancoso (Portugal) con un extrañísimo ceremonial. Véase B. RIBEIRO, O.F.M., Os Terceiros franciscanos por– tugueses. Sete séculas da sua história, Braga 1952, 30-33. 4 • Eo tempore per totam Hispaniam Fratrum Praedicatorum et Fratrum Minorum constituuntur monasteria, et ubique sine interrnissione verbum Domini praedicatur • (F. FITA, Biografías de San Fernando y de Alfonso el Sabio por Gil de Zamora, en Bol. R. Acad. Hist. 5 [1884] 308 ss); la frase, casi idéntica, del Tudense, en Acta SS., Maii VII, Paris-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz