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LA TERCERA ORDEN FRANCISCANA DE ESPAÑA 139 Terciarios ilustres Espigando en el conocido Martyrologium franciscanum de L Beschin y G. Palazzolo, hemos encontrado la conmemoración de unos 20 terciarios y terciarias (más éstas que aquellos), que vivieron a lo largo del siglo XV. Se trata casi siempre de fundadores o fundadoras de conventos o casas de vida común y que, por tanto, deben ser considerados más bien de la Tercera Orden regular, aunque antes pertenecieran a fraternidades segla– res. Creemos que vivieron y murieron como terciarios seglares los siguientes: Teresa Enríquez (11 de octubre, m. ca. 1490), esposa del almirante de Castilla don Fadrique, y fundadores ambos del convento de los observantes Medina de Rioseco hada 1477, junto al cual vivió Teresa durante 14 años entregada a la peniten– cia y a obras de caridad; Juan Martínez Montaraz (24 de julio, m. ca. 1500), esposo de Catalina López (15 de mayo, m. 1493), fundadora en 1488 del convento de terciarias del Viso; Marina (o María) Alvarez Marcos (13 de febrero, m. 1501), quien por espado de 20 años vivió con sus dos hijas Marina y Catalina en una pobre y humilde casa junto a una iglesia; María Suárez (5 julio, m. 1507), llamada « la pobre», pariente muy próxima de Fernando V el Católico, y que antes de fundar el convento de S. Isabel de Toledo, había vivido, con su compañera Juana Rodrí– guez (6 de enero, m. 1505), una prodigiosa vida de caridad. Falta en el martirologio el venerable Diego de Oviedo (m. 1499), ter– ciario que vivía retirado en la ermita de S. Miguel cerca de Alcántara, visitado en 1496 por su amigo el Beato Juan Hortelano, muy estimado por los Reyes Católicos 40 • Pasando a la nobleza de la sangre, los cronistas se muestran más cautos en calificar de terciarios a reyes y reinas especialmente sido fundado en 1439. Cf. J. B. Avelle-Arce, Los de Durango, Madrid 1974; J. Goñi Gaztambide, Los de Durango. Nuevas aportaciones (1442), en Hisp. Sacra 28 (1975) 225-238; M. López Rojo, Los de Durango (s. XV), en Estudios de Deusto 24 (1976) 303-318. Aclaramos que en dichos trabajos no resulta ninguna implicación de terciarias en la secta. 40 Cf. AM XIV, 504 (437).

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