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352 ISIDORO DE VILLAPADIERNA del Colegio de filosofía. En las listas de familias del capítulo de 1966, le encontramos, bajo el nombre de bautismo, Germán Zamora, con los cargos de lector, administrador de la revista e incluso delegado de la Obra Seráfica de Misas, cargo que ya le habían adosado en 1960 y que ciertamente no tenía nada de científico. Temperamentalmente tranquilo y reservado, entusiasta además de su oficio de enseñar y de investigar, parecería destinado a quedar anclado, para toda la vida, en el sosiego recoleto de Santa Marta, o en cualquier otro Colegio mayor. Pero ciertamente no era insensible ni ajeno a la realidad que se estaba viviendo en la provincia en la época posconciliar y en el mundo de la joven generación del 68. Para promover la adecua– da renovación, ya en acto en toda la Orden, templar y encauzar impa– ciencias y exigencias, un grupo de jóvenes profesores de Santa Marta, abiertos a los signos de los tiempos, en junio de 1968 crearon un bole– tín con el título programático: "Diálogo franciscano" . El P. Germán redactó el acta de nacimiento de este boletín ciclostilado, plataforma libre de opinión, y que fue también el agente de su notoriedad en la provincia. En efecto, en la primavera de 1969 fue elegido delegado, en el grupo joven, para asistir al capítulo provincial de julio. En la distribu– ción de las familias conventuales figurará solamente como lector del Co– legio de filosofía, pero por las crónicas del trienio sabemos que fue también bibliotecario, administrador de "Naturaleza y Gracia", secreta– rio de redacción con funciones de director, y "visitador de las bibliote– cas de la provincia", un cargo hasta entonces inusitado. En 1971, a partir del n. 19, se responsabilizaron de la edición del boletín los profesores del Colegio de Santa Marta, y el P. Germán fue el director hasta su extinción en enero de 1975. Desde las páginas del boletín, supo mantener el diálogo de la provincia en un nivel frater– no y estimulante, sin tonalidades de agresividad y de contestación. Pro– movido en la opinión pública de la provincia como paladín, o a lo menos portavoz, del movimiento que pedía insistentemente la acelera– ción del proceso de "aggiornamento", le encontramos entre los delega– dos del capítulo provincial celebrado en León del 19 al 27 de julio de 1972 y presidido por el P. General. El P. Germán fue uno de los moderadores de las sesiones y miembro de la comisión de forma– ción; en las votaciones salió elegido cuarto definidor, y por el definito– rio fue nombrado Presidente del Consejo de Formación. Volvió a Santa