BCCCAP00000000000000000000404

ORACION PARA TODOS LOS DIAS AQUI estamos, Madre, reunidos en nombre de tu Hijo y en tu nombre, para aprehder a rezar y a vivir. Aquí venimos, Madre, con nuestra carga de barro y culpa: con nuestra fragilidad de pobres hombres, con nuestras rebeldías instintivas, con nuestras lágrimas de desterrados, con nuestra miseria de hijos pródigos, con nuestra vergüenza de pecadores . Aquí estamos, Madre, reunidos por la misericordia de tu Hijo y por tu misericordia, para convertirnos y c reer en el Evangelio, para llorar amargamente nuestros pecados, para regresar -hoy mismo- a la casa paterna, para renovar las promesas de nuestro Bautismo, para seguirte a dondequiera que vayas. Aquí venimos, Madre, congregados por el amor de tu Hijo y por tu amor, para «recrearnos en tan graciosa belleza»: para cantarte «Purísima» y contagiarnos de tu resplandor, para felicitarte por «c reyente» y vivir tu fe, para declararte «dichosa» y celebrar tus grandezas, para admirarte pobre y compartir tu pobreza, para proclamar tu Maternidad divina y quererte como madre, para sentir el gozo y la nostalgia de tu Asunción y emprender contigo el vuelo, para que nos muestres a Jesús, fruto bendito de tu vientre. Aquí estamos, Madre, para verte, para cantarte, para imitarte, para quererte. Aquí venimos, Madre, ayúdanos a conocerte mejor para amarte más.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz