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86 P. PÍO DE MONDREGANES A propuesta de b misma Comisión central y previo el parecer del arzobis– po de Westminster, Eduardo l'vlanning, Pío IX dirigió la bula lam uos om– ncs, del 13 de septiembre de 1868, a los protestantes y a.católicos, exhortán– doles a volver a la Iglesia catolica, a la cual habían pertenecido sus antepa– sados antes de la R•eforma. La bula no fué igualmente recibida por todos; i.os anglicanos, en general, la acogieron con mfls simpatía que los protestantes de los países germánicos; pero prácticamente nada importante se consiguió (3). Con motivo de la convocación del Concilio surgió la¡ cu•estión de si se ha– bía de convocar también a los obispos titulares, como eran la mayor parte de los prelados de Jlviisiones, y en caso afirmativo, si tenían derecho al voto decis:vo en las sesiones del Concilio. Dejando aparte la cuestión de derecho, la Comisión central, el 17 de mayo de 1868 y el 14 de mnrzo de 18ó9, deter• minó que se convocasen; la decisión fué aprob<,da por el Sumo Pontific•e el 15 d0 junio de 1869 (4). Llegado el dia 8 de diciembre de 1869, fiesta de la Inmaculada Concep– ción de María, Pío IX lnang:.traba solemnem'ente en la Basílica V <lticana el XX Concilio ecuménico. De los 1.050 padres convocadDs• había presentes 700 que aumentaron después hastd 77-1. Cardenales, patriarcas, arzobispos, obis– pos, abades, generales de Ordt:nes religiosas de todas las partes del mundo catéAico, presididos por Pío IX, Vicario de Cristo y Pastor Supremo de la Iglesia, en el templo mús grande de la catolicidad, tenían la primera sesión pública, que duró nada m'enos que seis horas. PETICIONES Y \'OTOS REFEIH,NTES A LAS M1,;IONES PRESENTADOS AL CONCILIO. No sólo las Comisiones encar¡pdas de la preparación de las diversas ma– terias, sino también otros padres podrían presentar sus votos al Concilio. En– tre éstos vamos a indicar algunos que se refieren a fas Misiones. l." El día 23 de 'enero de 1870 suscribieron los padres del Concilioi una petición en favor de la pía Obra di? la Propagación de la Fe. Después de ex– poneT las razon\?s que a eso les movían, suplicaban: "Ut inter Decreta quae de Missionibus catholicis Sanctae et Oecumenicae Synodo Vaticanae pro– ponentur, unum adiiciatur, quoi piae Operae a Propagatione Fidei nuncupatae, et solenmis ab Ecclesia consecratio et nova commendatio tribuantur" (5). 2.º Otra petición semejante a la anterior el'evaron 61 padres del Concilio para que aprobara y recomendara la Obra de las Etcuelas Onentales, con el fin de: recoger subsidios para la educación de la juv•entud, los Seminarios y otras obras de beneficencia (6). 3." Unos 35 padres del Concilio, vicarios apostólicos entre infieles, ex– ponen a Su Santidad los bienes r'eportados en las l'vlisiones por la Obra de (;:) Cf. ('ECTO:'iI, Il,íd. (-!) ('f. C'ECCO:'iI. o r., 'tomo I, pú1ss. 11:: y sigs.; torno II, p:\gs. ,104 y sigs.; Co/lcct. Lacc¡¡sis, eol. 10:58-lO:m. (;';) ('ol/ed. Lacc¡¡sis, tomo YII, eol. 902; ::U.\SSI, Collcct. 8acl". Concil., tomo 53, col. 4G2-.\U::. (G) Cf. Collcet. J;accnsis, tomo YII, eol; no::-D04.

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