BCCCAP00000000000000000000392
PROBLEMAS !,I!SIONALES 77 Este título de l'v1ística Pastora de las almas c~tú muy en conformidad con las prerrogativas de la Virgen, de las cuales arriba hemos hecho mención. En efecto, l\llaría 'es la l\fadre del Bué'.n Pastor que vino a dar la vida por sus ovejas; es la Corredentora con Jesús, Cordero Inmaculado, sacrificado en la éruz por nuestra salvación; es la Medianera universal que alimenta a la grey con los saludables pastos de la gracia; 'es la Reina del universo que con su báculo pastora,\ manifiesta su autoridad en todos los dominios de su Hijo. Del mismo modo que el Buen Pastor va en busca de la oveja perdida y al encontrarla la pone sobre sus hombros para conducirla al aprisco, así también María Santísima, como vigilantísima Pastora, va en busca de los pecadores. infieles y herejes para llevarlos al redil de la Iglesia. D<?.sde su 'excelso trono de gloria da silbos amorosos, llamando con su dulce voz a todas las ovejas qu'e caminan errantes fuera del rebaño del verdadero Pastor. Compadecida de tantas ovejas que están todavía en poder de pastores mercenarios enga– ñadas con falsos dogmas y ritos supersticiosos, extiende sus solícitos cuida– dos de Pastora, procurando que la verdad del Evan0•elio 1es,uene en todos los extremos de la tierra... La historia y la •2:xpcrirncia de los misioneros en– seña que la expresión dulce,, mate'rna, cariñosa y simp:1tica de la :rviadre del Buen Pastor cautiva y arrastra, de una manera extraordinaria, a los sencillos indígenas, les inspira confianza y amor y les atrae al redil evangélico. ll. INFLUENCIA DE U\ VIRGEN EN LA ACCIÓN MISIONERA. Expuestos sumariamente los principal'es títulos misioneros, que en realidad competen a la Virgen, pasamos a indicar algunas reflexiones acerc:1 de su poderosa influencia en el ejercicio del apostolado. 1. Influencia en la conciencia misionera.-,-Los deberes misioneros incum– ben proporcionalmente a todos los grados de la jerarquía eclt:siástica y a ~o– cios los fieles cristianos, porque todos estamos obligados a dar a conocer a Dios y todos rogamos para que sea santificado s,u nombre y que venga a nos su reino. Las l'vlision'es no tienen otro fin más que establecer en toda la tierra el reino de Jesucristo para que todos los hombres se sah·en, Por tanto, todos los que nos preciamos ser hijos de Dios y de la Virgen ckbemos ronar, por intercesión de esta Medianera universal, Reina de las Ivlisioncs, para que el Señor envíf'. más operarios a su heredad, a fin de recoger la mies ya madura; para que la semilla evangélica se extienda también a otras pr,rtes; para qu'e se disipen las tinieblas del paganismo, se destruyan los error<cs de la herejía y del cisma, para que Cristo venza, reine e impere en todo el mundo. Lo,; propagandistas y educadores pueden aprovecharse de las festividades maria– nas, de las novenas en honor de la Virgen, del mes de\ mayo, tocando los de– licados s\:ntimientos de esta devoción, para demostrar las íntimas relacion,:::s que María tiene: con las Misiones; pnra suscitilr, en las conciencias cristianas, el deber ch: cooperar a la extensión del reino de J csú;s y de l'vbrí,1; para :ncul– car a todos la devoción a la Divina Pastora de las almas, Reina de las fvii– siones. Pío XI, al final de la Encíclica Rernm Ecclesiac, dice: "Que l\faría Santísima, Rc:na de los apóstoles, mirn con complacencb nuestros esfuerzos. Ella, que, habiendo recibido en el Calva-rio a todos los hombres por hijos suyos,
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz