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312 P. PÍO DE MONDREGANES 7. Apostolado de la caridad.-El apostolado de la caridad puede abrazar todas las obras de misericordia, tanto espirituales como corporales. La caridad tiene un programa vastisimo. Se extiende a todos sin excepción, a católicos y no católicos, a cristianos e infieles, a los vecinos, 2 los lejanos, a los de la patria, y a los de fuera d'e ella. Todos somos hombres criados por Dios. redimidos por Jesucristo, santificados por el Espíritu Santo. La caridad no tiene límites, a nadie excluye. Pero cuando hablamos del apostolado de la caridad en sentido vulgar nos referimos a las obras de 1Ycneficencié1 corporal, v. gr., asilos, hospitales, orfa– natos, casas de beneficencia, leproserías, asilos de pobres, manicomios. Todas esas obras que ha inventado la caridad cristiana. · Entran en el apostolado de la caridad las obras de ens\:ñanza elemrntal o superior, casas de corrección, reformatorios. El campo de b caridad hoy se extiende inmensamente y se aumenta c;ida día por las n·ecesidades espirituales, intelectuales, materiales y económicas de la sociedad presente. 8. Apostolado de la acción.--Esta acción puede entenderse en un sentido amplio, en cuanto se extiende a cualquier obra \.".xterior en bien del prójimo y de la sociedad en general. Particulam1ente suele entenderse 'en dos sentidos: Acción económico-social. que se ocupa principalmente de las cu'estiones so– ciales y económica5 en relación con los individuos, las empresas, las socieda– des. La acción social abraza muchos problemas que se plantean hoy en la soci'edad moderna acerca del capital, de la riqueza, de la propiedad, del lucro, de los empresarios, de los obreros. Jel salario justo, de los derechos\ del obre– ro y del patrono. En Sociología se agitan todos esos y otros muchos pro– blemas. Además hay otra actividad externa, otra acción que s'e llama .ll.cción Ca– tólica, recom'endada por Pío X, Pío XI y Pío XII. La Acción Católica y la Acción Ivlisional merecen un estudio especial por la importancia que hoy re~ visten. Penetración del apostolado &eglar.--Los seglares, por su condición particu– lar. pueden penetrar muchas ,'.::ces donde no le es fácil al sacerdote. Su apos– tolado directo o indirecto goza de cierta universalidad por el campo que abra– za. Su acción puede tener múltiple influencia. La familia,-El matrimonio crisbano csLí destinado a foruar una familia modelo. La observancia de los deberes conyugaíes mutuos, la educación de los hijos, las costumbres del hogar, las relaciones con la servidumbre, con las amistades y la sociedad heril deben ser objeto de apostolado de todos y de cada uno, según su r'espectiva condición. Catecismo.- --La base de la instrucción religiosa e.s el rntecismo. Para la formación cristianc1 del niño, del joven, de los adolescentes y de los adultos se debe poner como base indispensable la enseñanza integral y compl•eta de la doctrina cristiana, por lo menos la contenida en los catecismos elementales. Esta doctrina se debe enseñar a católicos y no católicos. Esi necesario orga– nizar bien la instrucción catequística en las iglesias, parroquias y diócesis. La jerarquía debe servirse en este punto del elemento seglar d'e ambos sexos.