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PROBLEl\lAS MISJO:S..l\LFS 201 Glorifica a tu Hijo a fin de que tu Hijo te glorifique a Ti" (3). "Yo te glo– rifiqué en la tierra consumando la obra que Tú me has encomendado que hi– ciese; y ahora glorifícame Tú, Padre, cabe ti mismo, con la gloria qu'e cabe ti yo tenía, antes que el mundo fuese" (4). La divina misión de parte de Cris– to está ya consumada; mas, para que de hecho redunde en gloria de Dios, necesita ser refrendada con la gloria del Hijo, con la resurrección, que será el sello divino de su misión y de su obra. Con 'eSlto la glorificación del Hijo será la glorificación del Padre ... Como la misión del Hijo es glorificar, en primer término, al Padre, asi tambi<':n la misión de los apóstoles, que es !a continuación de la misión divina, debe s'er, en primer término, _la glorificación de Dios ... 2. Salvar las almas.-La acc1on confiada a los apóstoles y a cuantos en el curso de los siglos heredarán su mandato, no es otra cosa que la acción dd Hombre-Dios extendida a toda la humanidad y llevada hasta los confines de la tierra. Sin perd'er de! vista el concepto básico de la gloria del Padre que caracteriza el ministerio del Salvador, Él pone en evidencia que el apostolado tiene por mira también la salvación y santificación de las almas; porque dice Tertuliano que ninguna cosa 'es más digna de Dios que la S<ilvación del hom– bre (5). Dios quiere la salvación de todos (6). Jesús se compara al buen pastor que da la vida por sus ovejas (7), y: que tiene otras ovejas que no son de este aprisco; ésas también t'engo yo que recoger, y oir;'m mi voz, y vendrá a ser un solo rebaño, un solo pastor (8). Jesús dice a San Pedro que apaciente los corderos (9) y pastoree sus ovejas (10). Ignorante Ananias de la milagrosa conversión de Saulo de Tarso, díjole el Señor: "Anda, porqu'e vaso de elección es éste püra mí, destinado a ilevar mi nombre delante de las naciones, y de los reyes, y de los hijos de Israel" (11). "Por mi causa ha sido constituido heraldo, apóstol y doctor de las gentes" (12). y no duda llamarle colaborador de Dics (13), 'embajador de Cristo, como si Dios hablase por su medio (14). "Pablo se ha::e todo para todos a firu de que todos se salven" (15). "Todo lo soporrto por amor de' los elegidos, para que también ellos alcancen la salud que se halla en Cristo J•csús con la gloria eterna" (16). La salvación de las almas es el fin genérico de todo apostolado. Todos los misioneros, todos los apóstoles, todos los operarios ev ~ 7 ~~ donde- (:l) !O.\:\"N"., :X\"IT, 1-2. (4) Iliíd., 4-5. (;'í) Adrcrsus .lforcio11., 1[. 27; J'. L., II, col. ((i) J l'i111., ll, 4. (7) Io 1:,!'.., X, 1L (8) Ibíd., X. rn. W) Ibíd., XXI, 15. (10) Ibíd., X, Hi. 17. (11) A et., IX. 15. (12) I 'I'im., II, 7; Ro111., XV, 13-10. (1:l) JI <'ar., V, 20. (14) 11 Cor., V, 20. (15) J Cor., IX, 19-22. (Hl) II 'I'im., II, 10.