BCCCAP00000000000000000000385

fuera del ámbito de nuestra Orden. Con cuanto cariño, respe– to y veneración nos enseñan, en la catedral de Jerez, ubicado con un pequeño retrato del Beato, el sitial del coro en el que acostumbraba ponerse a rezar con los regulares de la Colegiata, cuando estaba en esta ciudad. Ha querido, además, el Cabildo de Jerez, honrarle actualmente con una imagen, cedida por nuestro convento de Sanlúcar, que se encuentra expuesta al culto. Sorprende encontrarse en la catedral de Guadix con un altar dedicado a Fray Diego José de Cádiz, o saber que la Real Academia de Medicina de Sevilla mantiene aún, en lugar des– tacado, un cuadro del Beato, del convento de Sevilla, en homenaje y en recuerdo de haber sido honrado en vida como miembro de esta Real Academia. ¡No digamos nada de su veneración en Ronda, particularmente por la Real Maestranza!... Son muchas e; incontables las inesperadas sor– presas que pueden encontrarse en cualquier iglesia o rincón de España, testimonio de un recuerdo que no ha muerto, para bien o para mal, porque también, por la otra cara, nos encon– tramos, igual que en su tiempo, con sectores que pretenden desprestigiarlo con sus sátiras, sus críticas o su sucia chabaca– nería. Señal de que su obra, realizada según Dios, está sólida– mente fundamentada y fielmente realizada (lCor 3, 10-15). Para nuestra Provincia supuso, no solamente un título de gloria y causa - juntamente con otros hermanos - de hermo– sos calificativos como el de "Provincia Santa", sino el tener un paradigma claro e inequívoco de la vocación como ser y hacer concreto, existencial y vivencia!. El lema, síntesis magis– tral de su vocación personal, "capuchino, misionero y santo" 7

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz