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- 41 - elemento: aquel que el gran Lacordaire llama «cort– vencimiento reflejo». Es aquel convencimiento que proviene de los motivos de la fe; el convencimiento de San Agustin, de Santo Tomás, de Bossuet, de Fe– nelón, de Balmes, aquella certeza racional que, en un gran número de almas, se une a la certeza so– brenatural, porque nadie, por cierto, querrá negar en ésta la alianza de la fe con la razón. Pues bien; este convencimiento reflejo es preci– samente el que pretende formar en el ánimo de la juventud el Curso de enseñanza superior de la Re– ligión. Iluminar su espíritu, conservarla o restituir– la sus creencias, fortificarla y aguerrida contra los errores contemporáneos, prevenirla contra posibles emboscadas de sus enemigos..... ¿Qué medio puede darse más eficaz para formar del joven un perfec– to creyente que posea la fe y tenga conocimiento de la racionabilidad de la misma? «El acuerdo de la ciencia con la fe, he aquí el grito del tiempo presen– te, decía Alberto Hestch. Dios será mayormente glo– rificado por una sociedad creyente e instruída, que por una sociedad exclusivamente creyente, cual era la Edad Media».