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RAZONES NECESARIAS EN SAN BUENAVENTURA 7 revelado, nada tenemos que observar sino su coincidencia con la argu– mentación teológica generalmente conocida, en que de una verdad for– malmente revelada, por medio de una premisa de razón, se infiere una conclusión llamada "conclusión teológica" o verdad v:rtualmente re– velada. Sobre los principios de la Teología, que son los artículos de la fr, Santo Tomás admite como verdaderos argumentos probativos los, que se toman de la "autoridad" de la Escritura y de la Tradición. La 13- zón puede ejercer únicamenite una labor defensiva, resolviendo las ob– jeciones del adversario. La labor positiva s,e reduce a ofrecer lejanas analogías y congruencias que nos muevan a admitir la existencia del misterio 5 • - En cambio San Buenaventura, además de las de las ana– logías y congruencias convenientes, admite -en principio- que se dan verdaderas razones para probar la existencia del misterio. Ya ve– remos cómo admite tres clases de argu111;entos para probar la existen– cia del mi~terio de la Trinidad: por analogías, o semejanzas, por ra– zones y por autoridad. Lb específico de la labor teológica es argumen– tar por razones y analogías: únicamente cuando no hay razones se ha de recurrir a la autoridad de la Escritura 0 • El fundamento de este método bonaventuriano está e11 su doctrina sobre las relaciones entre el conocimiento científico y el conocimiento de fe. Sobre un mismo enunciado puede darse un conocimiento probable y un conocimiento de fe. Cuando la opinión signiifica duda de lo opues– to, no puede hallarse junto con la fe sobre un mismo enunciable, pero cuando significa un conocimiento que es fruto de razones probables y verosímiles., es indudable que puede hallarse junto con la fe •. Por la misma razón, sobre un mismo enunciable puede darse conocimiento teológico y fe, aún cuando la teología usa muchas veces de argumen- 5. Sum., 1q.l,a.8; in Boeth. de Trinitate, q.2,a,3. 6. «sic etiam cum deficit certitudo rationis, recurrit ad auctoritatís certitudinem,, l. S., prooem., p.2,resp.; I,llb,-Todo el Breviloquio-que pudiéramos llamar la pequeña Suma Teo– lógica bonaventuriana- es una demostración continuada de este método de demostración ra– cional de los misterios de la fe. Cfr. BoNNEFOY, ob. cit. en la nt. l. 7. «si autem dicatur secundo modo, scilicet acceptio derelicta ex rationibus probabilibus; sic dicendum est quod circa idem simul et semel potest esse opinio et fides, quoniam multi fide– les habent de bis quae·credunt, multas verisimiles rationes et multas probabiles, quae habent generare opinionem, quantum ad secundum modum dicendi opinionem; et illa acceptio generata fidei non repugnat, immo subservit et famulatur. Est enim in fidei fomentum quantum ad infir– mos et obJectamentum quantum ad perfectos,. lil S.,d.24,a.2,resp.; lll,521a. Cfr. I S.,prooem.,q. 2,resp.; l,lla.