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202 ESTUDIOS BÍBLICOs.--Teófilo de Orbiso, O. F. ::.Vl., Cap. últimos años (12) resuelvep las objeciones que &e oponen a a histqricidad, y denenden ésta en sentido estricto. ((El autor de Paralipómenos, dice Nordtz:.j, no se propone una mera reco_1s, 1 ruccióp ideológica del }?asado, sino que qmere dar sobre el fundamento de Las fuentes una verdadera his– torian (13). 5) La historia primitiva.--Lo que hemos dicho de la historia de Israel, eri general, ¿servirá tamb.én . para su prehistoria, es decir, para aquellas narraciones que precechm a la vocación de Abraham en los once primerns capítulos del Gérn,sis? En ellos se conlierie :o que se ha dado en llamar historia primora.'ial o primitiva, aunque a estos dos nombres se da un sen– tido muy distinto ; pr(mordiat, se refiere al tielr!po de los hechos narrados, los pripcipios del mundo y de .a humanidad, mientras que el apelativo de primiiiva hace relación al modo de narrarlos, modo primitivo de una his– toria en pañales, sin los cr:terios científicos ele una verdadera historia: es el grado ínfimo entre 'as varias formas que puede revestir el gfa1ero históri– co. La verdad que le corresponde participará de ese carácter iinperfeclo de la narración. Esta concepción corriente entre los racionalistas, fautores del panbabilonismo (14) privó también entre algm1os ca,ó icos (15), que veían en estos primeros capítulos del Génesis 11:itos poético: 0 . d:, origen antiquísi– mo, purificados por el hagiógrafo y adaptados por él al monoteísmo he– breo. Teoría reprobada por el Decrefo de .a. Comisión bíblica ele 1909 sobr·e el carácter histórico de los tres pr:meros capítulos del uc•ª'"""" Las scme- dc la narración bíblica con los mitos babi ónicos de la Creacióu (Enúma ElisJ, o del diluvio {lét epopeya de """ª""··· no arguyen dL·pep– dencia común ele 'a revelación primit:va, oscurecida y corrompida e;itre los paganos, y conservada pura e íritegra por una Proviclencia t·special en el pueblo de Dios. Por lo demás, esas sem,~janzas que afectan rr:ás bien a la forma, quedan anuladas por diferencias irreduciibles de fopdo. Y la tesis (12) N. ScHLÜGL: Die liiiclzer da /{mni/,, Wien, 1911; F. X. KUGLER: Von Jluses bis l'aulus, l\1ünster in \Y,. 1922; J. Cii1 TSBEJ«;ER: Die J1iicher der Cliro– nih oder Paralip., Bonn, 1989. (13) Cfr..\. BEA, en «Biblican, 22 (El.JI), .JG-58, donde h:1ce la n•c0n::i(m de df' to(l.:}s f':'tas obras. 14) \'{,a,(" s·,bre iod" H. CuxKEL en sn obra Sclliipfung ,rnd c·lwos, (;iiHin– gen_. 189Fi. (lii) F. L1::..0R:IL\:>¡T Lc.1 urogincs d,· /'liistuire d'aprt"s la liible et les tradi- licns des ¡wupics orientaux, I'arí;., 1880, ,\. Lo1sY Les 111ythes babylonirns et frs pri1mas chapitrts de la i;cnése, París, 1901; K. Hm,ZHEY' S,:hopfung, Bibcl 1111d I11sf'iratio11, \Yien, 1902.