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PRINCIPIOS DE POLÍTICA ESPAÑOLA EN ANGEL GANIVET 9 Es Ramiro de Maeztu (9) quien estudió "de propósito el tema de la nacionalidad española; éste empieza haciendo distinción entre elemen– tos ontológicos y valorativos (iO). Esta misma denominación marca ya la infinita distancia que media entre ambos pensadores, que es la que por fuerza tiene que mediar entre una mente católica y Úna men– te positivista. Maeztu centra todo el problema en la cuestión metafí– sica y de ella haremos especial mención al hablar de la solución negativa de Ganivet a este mismo problema. :i. EL TERRITORIO 8,) Cardcter perso-nal del territorio En el pensamiento gani"~etiano el territorio tiene en sí un carácter propio; antes, por tanto, de ser constitutivo de la nacionalidad. Esta cualidad peculiar de la geología es la de tener un espíritu, que Gani– vet llama "espíritu territorial", y que es capaz de influir en la vida consciente de los hombres. Pero lo importante es que el territorio puede reaccionar de modo propio ante otros territorios según su con– figuración geográfica; en suma, la tierra tiene una psicología típica según su topografía y su emplazamiento en el planeta (H ). Esta psi– cología o capacidad de actuar y reaccionar de modo determinado la transmite a las gentes que lo habitan y condiciona su vida político-so– cial, siempre que éstas sean fieles a la voz de la tierra. Por esto vamos a exponer primeramente el significado del "espí– ritu territorial" y su influjo en la vida humana; en segundo lugar haremos la aplicación de esta doctrina al caso concreto de la geogra- 1fa española. Dice taxativamente Ganivet: "Los territorios tienen un carácter na– tural que depende del espesor y composición de. su masa; y un ca– rácter de relación que surge de las posiciones respectivas: relaciones de atracción, de dependencia o de oposición" (12). El texto es explícito y habla por sí mismo. Son, podríamos decir, como la dirección centrí– peta y centrífuga de un mismo espíritu territorial. El carácter que re– sulta de la estructura geológica, o sea, la dirección centrípeta, influye en las creaciones humanas, particularmente las artísticas, como ve- (9) Maeztu es nueve afios más joven que Ganivet; nace a la vida. literaria sólo un afio después que el escritor granadino. Recibe su formación en Inglaterra. y en el Ejército inglés hace de corresponsal durante la guerra del 14. Allí, ante el dolor y la muerte, se opera un cambio radical de su ideologia heterodoxa y vuelve a la fe de su infancia. Por ella habría de dar su vida-precisamente el vigésimo afio de su conversión-el 29 de octubre de 1936. Sus obras más notables son: La crisis ael Humanismo; Don Juan; Don Quijote y la Celestina, y La defensa de la Hispanidad. (10) R. DE MAEZTU. o. c,, pág. 243. (11) En el concepto de la Naturaleza como cosa viva, puede encontrarse un as– cendiente en Carlyle, a quien Ganivet confiesa haber leido. De aquél, dice MENEN– DEZ Y PELAYO: "Carlyle es teósofo, y contempla. la Naturaleza, no como cosa muer– ta, sino como un sér vivo ...". Historia de las ideas estéticas en España, Edición Na– cional, 1947, t. IV, pág. 39Íl'. Posteriormente veremos cómo el influjo del medio en el arte relaciona a Ganivet con Taine, {12) A. GANIVET, o, e,, t. I, pá¡¡¡. 114,

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