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480 Fr. SATURNINO ARA, 0.F.M. Cap. 2. La verdad de la mujer en el franciscanismo En el ideario evangélico franciscano la mujer aparece junto al hombre como un Hermano que tiene un mismo origen, una misma naturaleza y un mismo destino. Cristo es el primogénito entre muchos hermanos 4 • Y a través de Cristo todos los seres humanos a quienes ha «hermanadm> el bautismo tienden hacia el Padre. Pero los Hermanos y Hermanas com– prometidos con la radicalidad evangélica, interpretada por Francisco de Asís, forman las nuevas fraternidades, independientes entre sí, con auto– nomía de gobierno, pero unidas en base a un ideal abrazado. El franciscanismo no ha podido sacar todas las consecuencias o con– clusiones que contienen y se deducen de estos principios de Hermandad e Igualdad, ya que de un modo u otro ha estado condicionado por las circunstancias históricas en que se ha desarrollado. Pero ha presentado un buen precedente de respeto a los derechos de la mujer, al dejar en manos de la seguidora de la forma de vida mínorítica la organización del propio régimen de gobierno y el cuidado y defensa de la realización de su opción 5 • a) El ministerio de las Hermanas franciscanas La presencia activa de las mujeres en las responsabilidades eclesiás– ticas no ha podido convertirse en «problema» para las religiosas fran– ciscanas o para las mujeres que forman parte de las Hermandades o Fra– ternidades seglares. Los autores espirituales y los estudiosos del franciscanismo ponen entre los elementos o valores esenciales de esta espiritualidad el de la Minoridad. Y nos dicen que la Minoridad, al igual que la Fraternidad o el Evangelismo, es un algo tan inherente al espíritu franciscano que sin ella no se darla la realización de este carisma con el que el Señor enri– queció a su Iglesia. La Minoridad, al igual también que la Fraternidad o el Evangelismo, no es por consiguiente una característica del franciscanismo, sino un algo muy profundamente radicado en el mismo, de forma que sin Minoridad no habría franciscanismo. No es tampoco la Minoridad una simple virtud, ,, Romanos 8, 29. o Cfr. 2 CELANO, núm. 204.

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