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l. PRESENTACION DEL TEMA A doctrina paulina de la ley está en estrecha conexión con su mensaje de salvación, más aún, se identifica con él. Su obra misionera no es otra cosa que la puesta en práctica del men– saje de salvación y de la doctrina de la ley. Este problema fue también el que más quebraderos de cabeza y más incomprensiones deparó al apóstol universal. Sus afirmaciones tajantes fueron mal interpretadas en los años siguientes a su muerte, como lo demuestran, por ejemplo, las cartas de Santiago y Judas. La segunda carta de Pedro pone en guardia contra este peligro: ''En las cartas del hermano Pablo hay algunos puntos difíciles de comprender, que los ignorantes y poco firmes interpretan torci– damente, lo mismo que las demás Escrituras, para su propia perdición (3, 16). Santiago lucha contra los que tergiversan la doctrina de Pablo sobre la justificación por la fe sola. Judas lo hace contra los que pervierten el pensa– miento paulino acerca de la salvación por pura gracia, para justificar un libertinaje moral, una liberación de toda atadura, de toda exigencia ética. Estas posturas tienen su culminación en la frase que se achaca, con poco fundamento crítico según parece, a los primeros protestantes: "peca forti– ter, sed crede fortius". 1 1 Bibliografla de índole general: R. BULTMANN. Teología del Nucrn Testamento. Salamanca 1981. G. BoRNKA!-1\1. Esrudios sobre el Nuevo Testamento, Salamanca 1983. Pablo de Tarso, Salamanca 1979. J.M.ª ÜONZALEZ Rurz, El Evangelio de Pablo. Santander 1988. G. EIC!l!lOL?. El evangelio de Pablo, Esbozo de 1eo!ogía paulina, Salamanca 1977. O. Kuss. San Pablo, La aporración del Apástol a la teolog{a de la Iglesia prímiriva, Barcelona 1975. H. CoNZELMANN. Theo!ogie du Nouveau Testamem, París 1967. L CERFAUX. El crisliano en S. Pablo, Bilbao 1965. L'ltineraire Spiriruel de Saint Paul. París 1966. J. MLRPllY-O'CoNNOR. L'exístencc chre- 15