BCCCAP00000000000000000000358

fundidos en mi alma el c;ielo y la tierra: dolor y esperanza que en tus ojos brillan, al rodar tus lágrimas, como estrellas puras que del cielo bajan. Yo tengo dos madres que tienen un alma y que juntas vierten, si peco, sus lágrimas. Las dos dolorosas, las dos con espadas, que su amante y puro corazón traspasan. Y he visto a una de ellas cómo me abrazaba llorando mi culpa, para ella cruel daga, y sé que aún entonces ¡qué buena! me amaba. Por eso aún te miro lleno de esperanza. !Madre Dolorosa, mírame a tus plantas! ¿Por qué lloras Virgen Madre desolada? Que es triste, muy triste y el alma traspasa mirar esos ojos que el sol id9latra, nublados de llanto que su luz empaña, ahora que me p,ostro -58-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz